La instantánea se tomó en enero de 2016, durante una sesión fotográfica en una isla griega para el magacín de actualidad India Today. Pero no todo el mundo consideró ética esta forma de protesta contra la política europea de asilo. Y desencadenó una ola de discusiones en los medios. ¿Es legítimo hacer arte con el atroz sufrimiento de los refugiados?

 

India Today 1/2/2016

“El equipo de India Today pasó  48 horas con Ai Weiwei en la isla de Lesbos. El artista quiere erigir un memorial en  homenaje a los refugiados, llamar la atención sobre la situación desesperada de estos, y lanzar un mensaje de paz, hermandad y confianza“.

 

Washington Post 30/1/2016

(Intrevista a Sandy Angus Copropietario de Indian Art Fair)

“Es una imagen icónica, porque es muy política, humana y porque participa un artista tan importante como Ai Weiwei”.

 

artefakt-sz.net 20/6/ 2016

“Tal vez tenga que ver con la piedad y la compasión, en cualquier caso lo que quería Ai Weiwei es que no se olvidara al niño muerto“.

 

Hannoversche Allgemeine Zeitung 1/2/2016

“Es una acción que perturba y remite a un suceso horroroso, que sigue ocurriendo, y además forma parte de un mercado del arte desenfrenado, cuya moneda de cambio es la atención. ¿Estamos ante arte político o es simplemente una pose más bien embarazosa?”

 

Achgut.com 22/3/2016

“Lo que quedó es el regusto insípido de un artista que se sirve de la atención mediática, y se tumba en una playa como un mártir por una buena causa, para conferir a su acción un carácter pararreligioso”.

 

faz.net 3/2/2016

“No es la primera vez que los críticos le achacan querer atraer la atención hacia su propia persona, a través de supuestas expresiones políticas”.

“La fotografía de Ai no pretende ser arte. Solo es un medio para alcanzar un fin… Pues a diferencia de los muchos cadáveres de migrantes ahogados, la corpulencia de Ai ofrece una de las mejores superficies de exposición públicas. Todo lo que se muestre sobre esa superficie, llega a todos”.

 

Süddeutsche Zeitung Magazin 26/5/2016

“Está claro, que Ai Weiwei quiere ser incómodo. Para él, forma parte de su trabajo. Un artista contra el sistema: antes era la dictadura en su país, ahora la política europea de asilo. Y probablemente, el quid de la cuestión no resida en que él haya cambiado, sino en la forma en la que es percibido”.

 

Welt N24  1/2/2016

“¿Qué es lo que espera de esta acción, precisamente el gran moralista Ai Weiwei? No queda más remedio que abordarlo con cinismo: tal vez quiera iniciar un “reto del cubo de agua helada” para refugiados. Quizá desee realmente que se copie la pose… Y uno no quisiera imaginarse a Ai Weiwei arrodillándose sobre los guijarros y rodando por la playa en busca de la postura adecuada”.

 

 

Art Das Kunstmagazin 5/10/2016

“Cuando artistas como Ai Weiwei… se ponen a denunciar injusticias como en el caso de la política europea de asilo, suelen arreciar las críticas. Como aquí en Art: es un arte que provoca el escándalo, es demasiado agresivo y estentóreo. ¿Pero qué otra cosa es, si no, el arte político?… (Los críticos) quieren domesticar el arte político, reduciéndolo a una versión ligera, sin fauces, que discuta cuestiones políticas con tacto, con corrección, discreción y sin hacer alardes de humanidad“.

 

Spiegel  Online 3/9/2015

Entrevista al especialista en ética mediática, Peter Maxwill

“... Los periodistas no deberían utilizar tales fotos para aleccionar a sus lectores o despertar su interés. La imagen en sí es lo suficientemente estremecedora“.