Más pobres en Alemania
15 de octubre de 2006Según el estudio de la Fundación Friedrich Ebert citado por el dominical "Bild am Sonntag", el ocho por ciento de la población pertenece a esta nueva clase baja. Esta nueva pobreza es especialmente patente en el este con un 20 por ciento de los ciudadanos, mientras en el oeste sólo un cuatro por ciento de la población pertenece a este estamento.
Dos terceras partes de esta clase pobre han perdido sus puestos de trabajo. El resto cree que su empleo no es seguro. La mayoría de estas personas tiene salarios muy bajos, muchas deudas, prácticamente ninguna reserva económica, como puede ser una propiedad inmobiliaria, y escaso respaldo familiar.
Los nuevos pobres se sienten socialmente marginados y abandonados por el Estado y muchos de ellos creen que con menos extranjeros en el país se solucionarían sus problemas, señala el estudio.
Pobreza en todos los aspectos
El informe provocó la alarma en el SPD, cuyo presidente, Kurt Beck, fue el primero hace unos días en hablar de esta nueva clase baja y de la necesidad de combatir esta situación. El secretario general del SPD, Hubertus Heil, aseguró en una entrevista al diario "Der Tagesspiegel", que su partido se ha propuesto luchar contra estos problemas y elaborar una nueva filosofía del Estado social.
"La nueva pobreza no sólo es una pobreza material" sino también cultural y educacional; además, se caracteriza por ofrecer menos oportunidades de llevar una vida sana, señala Heil, para quien la clave está en fomentar un "Estado preventivo".
No se trata de que el Estado social se centre simplemente, como en el pasado, en transferir fondos, sino de crear las condiciones necesarias para prevenir la pobreza, por ejemplo, logrando que las guarderías infantiles sean gratuitas, señala Heil.
Uno de los grandes problemas de la educación alemana son las deficiencias en un sistema gratuito y que funcione a tiempo completo de forma que los padres puedan trabajar. Heil reconoce algunos errores en los últimos años en el sistema social, al permitir, por ejemplo, que en el mercado laboral pueda haber una "explotación" del trabajador.
Herencia del Gobierno Schröder
Como ejemplo cita el caso de guardas de seguridad en el este de Alemania que trabajan por 3,50 euros la hora, aludiendo también a la necesidad de regular el salario mínimo. En Alemania la negociación de los convenios colectivos es competencia exclusiva de los agentes sociales y no existe el salario mínimo por ley, pendiente de discusión desde hace tiempo.
Para Ottmar Schreiner, uno de los afines a la corriente de izquierda del SPD, la nueva pobreza es sobre todo consecuencia de la política de reformas del socialdemócrata Gerhard Schröder. "La pobreza y marginación social no nos ha sobrevenido así porque así... son resultados de la política de Gerhard Schröder", sobre todo de su política de trabajo liberal, afirma Schreiner, uno de sus principales críticos del Gobierno del ex canciller.
Schreiner celebra que su partido se haya percatado por fin de que hay millones de personas que no logran salir de un sector laboral con salarios paupérrimos. A juicio de Hubertus Heil, el hecho de que el SPD esté en coalición con los cristianodemócratas no es obstáculo para dar un giro a esta situación.
"La gran coalición ya ha puesto muchas cosas en marcha: el programa de crecimiento, el dinero para las familias, la reforma del federalismo y la consolidación presupuestaria son algunos de los puntos", dice Heil.