La UE pierde terreno ante China en AL
15 de marzo de 2011Europa tiene que ponerse las pilas si quiere no perder del todo el terreno que ha ido ganando China en el continente americano. Una mirada hacia el pasado demuestra afinidades “más que ningún otro continente”, decía el director general adjunto de comercio de la Comisión Europea en una conferencia acerca de inversiones en América Latina. En el pasado queda también el olvido al que fue relegado el continente americano; ahora se trata de refrescar las relaciones, de cooperar, de invertir. Sin embargo, en todo ese tiempo, América Latina orientó su vista hacia Asia.
Un futuro promisorio…
Como fuere, el lema es ahora recuperar tiempo y terreno perdidos. En una mirada optimista hacia el futuro se vislumbra un acuerdo de asociación con Mercosur con un volumen de intercambio gigante; un acuerdo con el bloque centroamericano; un acuerdo con Perú y Colombia, al que quizá también acaben por optar Ecuador y Bolivia.
Un freno en el presente
Con todo, el presente -pese a todo futuro promisorio- lleva necesariamente hasta la China y su imparable eficiencia negociadora y su fuerte presencia en el continente. “Mientras que para el tratado de libre comercio con China hemos tardado un año”, decía en la conferencia la ministra costarricense de Comercio, Anabel González, “con la Unión Europea tardamos tres años en firmarlo”. A la firma en Madrid, en mayo de 2010, sigue el proceso de revisión legal, de ratificación por las diversas instancias europeas. Hasta que entre en vigor, podríamos tener ya avanzado el calendario del 2012.
Así también para el fin de las negociaciones con Mercosur, retomadas en 2010, no hay un horizonte claro. De la actual ronda de negociaciones –del 14 al 18 de marzo en Bruselas- se pasará a una siguiente ronda en mayo en Asunción. Es la oposición de fuertes sectores de la agroindustria europea –como la ganadería- lo que frena en mucho la conclusión de un acuerdo. En el Parlamento Europeo, por otro lado, se exigió un estudio previo del impacto que tendría una apertura del mercado europeo al gran gigante latinoamericano. "No vamos a negociar por siglos, no va a durar para siempre, pero no hay una fecha específica para terminar", subrayó Joao Aguiar Machado, negociador de la Comisión Europea para el acuerdo con Mercosur.
¿No se trata sólo de comercio?
Por otro lado, “no hay que olvidar que son 27 países”, recalca el negociador de la Comisión Europea y “además no se trata sólo de tratados de libre comercio sino que tienen un componente de desarrollo y de diálogo político”, insiste. Eso los hace más atractivos; la prueba está en que Ecuador y Bolivia han vuelto a tocar a la puerta de las negociaciones para un tratado de cooperación y desarrollo.
Así las cosas, si al crecimiento del 8 por ciento de la región latinoamericana, a sus codiciados recursos naturales se suma el “bonus demográfico, ¿por qué no invertir ya en América Latina? “Necesitamos acuerdos marcos, protección legal, que se garantice la propiedad intelectual”, respondía Bernhard Graf von Waldersee, embajador alemán y director General para América Latina y el Caribe en el ministerio de Asuntos Exteriores. Para esto, entonces, los acuerdos de asociación.
Para muestra, un botón
Con todo y a pesar de todo retraso en el acuerdo, Costa Rica -el “niño modelo” de los países centroamericanos- exporta en total, sobre todo frutas, más hacia la UE que hacia China. Hasta el momento. “Tanto la UE como China son socios importantes de Costa Rica, de hecho ambos compiten por el segundo lugar en el comercio de Costa Rica”, dijo a DW la ministra González.
Su país ve con muy buenos ojos la entrada en vigor del acuerdo con la UE, pues abre las puertas también al intercambio en ramos industriales. Así, “la relación con China ha pasado más bien por la participación en cadenas globales de valor, en las cuales Costa Rica tiene una participación importante, por ejemplo en los sectores de electrónica; allí y en la infraestructura China es ya un socio comercial muy importante”, añade González.
El futuro en el crecimiento verde
Por otro lado, el pequeño país centroamericano que ocupa el tercer lugar en el índice mundial de acción por el medio ambiente y el primer lugar en la misma lista para todo el continente americano, ve en el aspecto tecnológico para el crecimiento verde, inmensas posibilidades de intercambio y cooperación.
“A diferencia de otros países, Costa Rica no basa su desarrollo en la extracción de recursos naturales, sino más bien en la protección de esos recursos naturales; se ha comprometido a ser carbono neutral para el año 2020-21 y ya ha empezado a tomar una serie de medidas en esa dirección; todas esas medidas abren una gran cantidad de posibilidades de inversión.” En ese camino, así la ministra, “la UE claramente es un socio natural nuestro en este camino hacia un desarrollo sostenible, hacia un desarrollo verde”.
Autora: Mirra Banchón
Editor: José Ospina-Valencia