¡Que viva el servicio militar voluntario!

Más reducido, más económico y más eficiente. Así será en un futuro próximo el Ejército alemán si prosperan los planes de reestructuración elaborados por el ministro de Defensa, Karl-Theodor zu Guttenberg. Unas propuestas que el político miembro de la Unión Social Cristiana de Baviera (CSU) presentó oficialmente el pasado lunes (23.08.2010) y cuyos detalles zu Guttenberg sigue desgranando mientras intenta sumar apoyos a su iniciativa.

Voluntarios a prueba

En caso de prosperar, la reforma supondría la supresión del servicio militar obligatorio. Una obligación con la que el año pasado cumplieron 69.000 jóvenes alemanes y que el propio ejecutivo de coalición liderado por la canciller, Angela Merkel, redujo el año pasado de nueve a seis meses. A cambio, el titular de Defensa alemán abriría las puertas del Ejército a aquellos jóvenes que quisieran prestar servicio en las Fuerzas Armadas de forma voluntaria.

"Necesitamos también en el futuro a hombres y mujeres jóvenes que sirvan -al Ejército- por un breve periodo de tiempo, es decir, entre 12 y 23 meses", declaró el ministro al diario "Bild am Sonntag". Una posibilidad que serviría para cubrir entre 7.000 y 15.000 plazas de un Ejército cuyo contingente se verá reducido en un futuro próximo de 250.000 a 163.500 efectivos. El 95% de ellos, según zu Guttenberg, serán "profesionales".

La pregunta es obligada: ¿de qué aliciente dispondrán los futuros soldados voluntarios alemanes para ejercer el servicio militar? Según el titular de Defensa, "un sueldo decente, cotización para el seguro de pensiones, optar a plazas de estudio y mucho más". Además, se establecerá un periodo de prueba de seis meses, tras los cuales los soldados voluntarios podrán abandonar el Ejército o permanecer en él como profesionales. Un tiempo de prueba que podrán aprovechar, por ejemplo, para obtener el carné de conducir.

El ahorro no es el único objetivo

La profesionalización de las Fuerzas Armadas alemanas y la supresión del servicio militar obligatorio supondrá un sustancioso ahorro para las arcas públicas. Alrededor de 4.500 millones de euros hasta el año 2014, según la propuesta del ministro de Defensa, una cifra que Angela Merkel estaría dispuesta a incrementar. Sin embargo, zu Guttenberg reiteró que el ahorro no es el principal objetivo, sino que lo importante es lograr unas Fuerzas Armadas más modernas y eficaces. "Queremos un Ejército mejor diseñado" para hacer frente a los crecientes desafíos derivados de las intervenciones militares a nivel internacional.

El hecho es que la "Bundeswehr" es, a menudo, el blanco de las críticas por parte de aquellos que consideran obsoletas sus estructuras, además de muy caras y poco flexibles. Críticas que comparte, por ejemplo, el presidente de la Cámara Alemana de Industria y Comercio, Heinrich Driftmann. Un Driftmann que considera al Ejército un "caso de saneamiento". En declaraciones al semanario "Focus", instó a "adelgazar" la estructura de las Fuerzas Armadas.

Una opinión, además, de peso, la expresada por el presidente de la Cámara de Industria y Comercio. Y es que Heinrich Driftmann es vicepresidente de la comisión de reforma del Ejército. "Hoy disponemos de un Ejército relativamente grande. Sin embargo, de los 250.000 soldados de que disponemos sobre el papel, como mucho 8.000 están disponibles" para participar en misiones en el exterior. Además, aboga por "reducir a la mitad" el propio Ministerio de Defensa.

Por último, Driftmann no duda en señalar el por qué de la importancia de diseñar un Ejército más eficiente para Alemania: "se trata de nuestros intereses legítimos. Sería una catástrofe que las vías comerciales, especialmente hacia el sureste asiático, se vieran restringidas o amenazadas de forma permanente. No debemos abandonarlas en manos de los piratas".

Autor: EV/dpa/afp/reuters

Editor: Claudia Herrera Pahl