México-Alemania: la economía brilla

México es atractivo para empresarios e inversionistas alemanes. En primer lugar por la estabilidad de su política económica orientada al libre mercado. “El año pasado el intercambio comercial aumentó en un 20%, comparado con otros países latinoamericanos es un incremento muy alto que convierte a México en el mercado de exportación más importante para la industria alemana en la región", advierte Sigrid Zirbel, directora para América Latina de la BDI, la poderosa Confederación de la Industria Alemana, techo de 36 asociaciones industriales. La experta recuerda que México desplazó a Brasil en 2014 como primer productor automotriz de Latinoamérica.

Aunque según Zirbel las reformas en el sector energético y de telecomunicaciones emprendidas por el gobierno mexicano han jugado un papel importante, lo más atractivo es su apertura comercial, tanto su vínculo a Estados Unidos a través del TLCAN, como a Latinoamérica. “Desde México se puede acceder a través de tratados de libre comercio a unos 45 países, lo que es una gran ventaja para México como polo de inversión“. A eso se suma la creciente industrialización del país, de la mano del pujante sector automotriz.

Más de 1.600 empresas alemanas en México

Más de 1.600 empresas alemanas, con una inversión que asciende a unos 25 mil millones de euros, se encuentran presentes en México en sectores como el automotriz y de autopartes, industria química y farmacéutica, transporte, logística y el sector energético.

Aunque el país sigue dependiendo del mercado estadounidense adonde destina el 80% de sus exportaciones, busca diversificar sus mercados. Alemania es el socio comercial más importante dentro de la Unión Europea. El Ministerio alemán de Economía subraya el interés de Alemania por profundizar sus relaciones económicas con el país latinoamericano, pero destaca la importancia de continuar con el combate contra la corrupción y con el fortalecimiento del Estado de derecho.

“La situación de inseguridad sigue siendo un aspecto de peso para las empresas alemanas, pero consideran más importantes las ventajas que ofrece el país“, según un portavoz del Ministerio alemán de Economía. “México acordó una reforma anticorrupción en 2015 que será implementada con un paquete de leyes que se esperan en mayo de 2016. Además el país trabaja con la OCDE en un programa de prevención de corrupción. El gobierno mexicano muestra un gran interés en estrechar su cooperación con Alemania, lo cual saludamos“, destaca el vocero.

Energías renovables: alto potencial en México

Por su parte Manuel Neumann, responsable para México, Cuba y América Central de la Asociación Empresarial para América Latina, con sede en Hamburgo, destaca que el sector automotriz es el más brillante en cuanto a los números, pero hay otros que resultan interesantes para las empresas alemanas interesadas en Latinoamérica, como el energético, el de servicios y la agroindustria. Más que el sector de petróleo y gas lo que interesaría a los alemanes es el mercado de energías renovables.

“Geográficamente México tiene buenas capacidades para desarrollar energías renovables. Pero no hay un cambio en la política energética a raíz de la baja en los precios del petróleo, pese al potencial que tiene el país para desarrollarlas“, destaca Neumann.

Entre las debilidades que muestra México desde el punto de vista alemán está la falta de personal calificado. “Es un problema en toda América Latina, y en México en particular, debido a la actual dinámica de crecimiento. Todas las empresas alemanas buscan febrilmente fuerza laboral capacitada, incluso algunas capacitan al personal según el modelo alemán de formación dual“, señala por su parte Sigrid Zirbel.

Es conocida en México la abundancia de licenciados, pero no se valora la alta capacitación técnica. Por ejemplo, la mecatrónica, una disciplina que combina la mecánica, la electrónica y la informática, que es indispensable en la industria automotriz. “Creo que ahí es necesario el apoyo del gobierno. La capacitación en oficios técnicos no está culturalmente tan arraigada en México como en Europa“, concluye Zirbel.