Nicaragua piden justicia y libertad a tres años de protestas
19 de abril de 2021La oposición de Nicaragua demandó el domingo (18.04.2021) "libertad, justicia y democracia", con motivo del tercer aniversario de las protestas contra el gobierno del exguerrillero sandinista Daniel Ortega, que fueron duramente reprimidas con un saldo de cientos de muertos, heridos, presos y miles de exiliados.
"A tres años de ese 18 de abril, la lucha sigue, y el espíritu de lucha y valentía de los nicaragüenses sigue intacto, por lo que en este año 2021 el pueblo de Nicaragua permanece firme demandando libertad, justicia y democracia y con esperanza de un futuro en paz", señaló un comunicado de la Alianza Cívica, una de las organizaciones opositoras al gobierno.
Mientras, familiares de las víctimas que dejaron las manifestaciones que estallaron el 18 de abril de 2018 rememoraron los hechos con misas en distintas ciudades del país, donde los asistentes aprovecharon para realizar breves protestas, debido al permanente asedio policial.
Uno de los oficios religiosos se celebró en la iglesia San Miguel Arcángel, en la ciudad de Masaya, al sureste de Managua, presidido por el sacerdote Edwin Román, y fue resguardada en las afueras por policías y simpatizantes sandinistas, aunque no se produjeron incidentes.
Durante la misa se desplegó sobre el púlpito una bandera de Nicaragua, que los opositores utilizan como símbolo de las protestas contra Ortega. Los asistentes también portaron fotografías de sus familiares fallecidos o presos, según ellos, por participar en manifestaciones antigubernamentales.
El sacerdote Román, un fuerte crítico del gobierno, explicó que dedicaba la misa a las víctimas del estallido social de hace tres años, y aseguró que "estamos hartos de la dictadura", en referencia al régimen de Ortega.
"Aquí no queremos esos Mesías que se autollaman salvadores, aquí no queremos sistemas esclavizantes y opresores, ya nos cansamos, de corrupción, de crímenes de encarcelamientos, estamos hartos de la dictadura", sostuvo el religioso, cuya parroquia sirvió como refugio para los que protestaban contra Ortega.
Otra misa se celebró en la iglesia San Antonio de Jinotepe, 50 kilómetros al sur de la capital, donde varios opositores se reunieron en el atrio para corear consignas contra el gobierno sandinistas. Aunque no hubo enfrentamientos, los asistentes denunciaron que patrullas de la Policía asediaro el templo.
También en Miami, Estados Unidos, el exobispo auxiliar de Managua, monseñor Silvio Báez, ofició una misa para recordar a los manifestantes asesinados durante la rebelión cívica.
El 18 de abril de 2018 estallaron manifestaciones en rechazo a unas controvertidas reformas a la seguridad social y que luego se convirtieron en una revuelta donde se exigió la renuncia del presidente Ortega, debido a que respondió con la fuerza.
Las protestas, calificadas por el Ejecutivo como un "intento de golpe de Estado", dejaron 328 muertos según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aunque organismos locales elevan la cifra a 684 y el gobierno reconoce 200.
gs (efe, Confidencial, Artículo 66)