Nuevo premier británico ante gran desafío
12 de mayo de 2010El gobierno debe "enfrentar grandes desafíos y tomar decisiones difíciles, teniendo en cuenta a los ciudadanos, de modo de alcanzar juntos mejores metas". Eso dijo David Cameron al ser nombrado nuevo primer ministro británico, refiriéndose sobre todo a la desastrosa situación económica y al déficit presupuestario récord, que supera el 11 por ciento del producto bruto interno. A la hora de definir exactamente los recortes habrá que ver cuánto influyen los liberales demócratas, que forman junto a los conservadores la coalición de gobierno, y que se muestran más cautelosos respecto a medidas de ahorro drásticas.
Cameron anunció que presentará un presupuesto de emergencia en un plazo de 50 días y que quiere tomar las "decisiones difíciles" mencionadas antes, durante los primeros seis meses de su gobierno.
Coalición despierta gran expectativa
Los mercados celebraron el acuerdo entre conservadores y liberales demócratas, con la esperanza de que un gobierno liderado de los conservadores de centro derecha actúe con rapidez para reducir el gasto. Los liberales demócratas también están celebrando luego de décadas a la sobra del laborismo y los conservadores. "Por supuesto que existirán problemas, por supuesto que habrá desperfectos. Pero siempre haré lo mejor para probar que una nueva política no sólo es posible, también es mejor", dijo a la prensa el líder liberal demócrata Nick Clegg, quién será vice primer ministro, un cargo sin base de poder, ni tareas específicas. Su partido puso su sello final de aprobación al pacto en una reunión que concluyó luego de la medianoche del martes (11.05.), sin dejar en claro cuáles fueron las concesiones hechas por los conservadores.
"Tory Blair" asume
Desde que David Cameron asumió como líder del partido conservador en diciembre del 2005 se lo compara con Tony Blair. Al igual que su antecesor laborista, Cameron intenta reactivar su partido con su impulso juvenil. El nuevo jefe de los tories prometió en aquel entonces modernizar su partido y orientarlo desde su posición demasiado derechista más hacia el centro del espectro político.
Al igual que Blair asume como jefe de gobierno con sólo 43 años de edad. Siendo Cameron aún unos meses más joven que Blair, lo cual lo convierte en el primer ministro más joven de Gran Bretaña en casi 200 años.
David Cameron se traslada ahora con su esposa Samantha y sus hijos Nancy y Arthur a su nuevo domicilio, en la famosa Downing Street. En septiembre se espera el arribo de un nuevo integrante en la familia. Y al igual que cuando vivía la familia Blair en la residencia de gobierno, se volverán a oír los llantos de un bebé.
¿Conservador compasivo o elitista?
Desde un principio David Cameron fue bien acogido por los medios, aunque los británicos también critican cierta ambivalencia en él. Por un lado, se lo compara con Barack Obama y se lo nombra como "única esperanza" para salvar a Gran Bretaña. Por el otro, se publican fotos que muestran al joven David de frac, durante su época de estudiante en Oxford, como digno representante de la altísima burguesía.
El propio Cameron intentó contrarrestar su imagen de upper-class-David, mostrándose públicamente en mangas de camisa, andando en bicicleta, cambiando los pañales de sus hijos o ironizando sobre su origen "asquerosamente privilegiado". Pero los británicos aún no están seguros, si los conservadores cambiaron sólo de fachada o también en el fondo.
Formando el gabinete
El primer ministro anunció el martes (11.05.) a última hora que habría cinco liberales demócratas en el gabinete, incluyendo a Clegg. Cameron no nombró a los otro cuatro, pero hay reportes de que Vince Cable, el respetado portavoz económico de los liberales demócratas, tendría un rol supervisando la banca y las empresas. El foco estaría más en reducir el gasto público que en aumentar los impuestos. Otra fuente del Partido Conservador dijo que George Osborne, un cercano amigo y aliado de Cameron, se convertiría en el nuevo ministro de Hacienda, o ministro de finanzas. Algunos en el sector financiero han expresado dudas sobre Osborne debido a su falta de experiencia y porque asumirá una economía que emerge de la peor recesión desde la Segunda Guerra Mundial. William Hague, ex líder conservador y perteneciente al ala derechista y antieuropea del partido, sería ministro de Relaciones Exteriores, lo cual no facilitará precisamente las negociaciones con la Unión Europea en el futuro.
Europa y Gran Bretaña – historia de amor y odio
Apenas David Cameron ingresó al número 10 en la londinense Downing Street, ya recibió las primeras llamadas de felicitación de sus homólogos de ultramar y de Europa. Barack Obama lo invitó a visitar su país el próximo mes de julio. Lo mismo hicieron Angela Merkel desde Berlín y Nicolas Sarkozy, desde París. Este último instando al premier británico a trabajar en favor de Europa. Este será, sin duda, uno de los grandes desafíos para Cameron, que suele mostrarse antieuropeo y en su campaña electoral incluso prometió a sus compatriotas devolver algunas competencias de Bruselas a Londres. Ahora deberá restablecer la confianza de su partners dentro de la UE, a quienes aseguró querer trabajar constructivamente. Se espera que los liberales demócratas ejerzan una influencia positiva en este sentido en el premier británico, pero éste ya anunció que en temas europeos no permitirá opiniones divergentes.
Autora: Valeria Risi /dpa/Reuters
Editora: Claudia Herrera Pahl