Observatorios del mundo evalúan resultados de la Misión Dart
28 de septiembre de 2022Misión cumplida. La nave espacial enviada por la NASA para desviar la trayectoria de un asteroide impactó este lunes su objetivo, como parte de una novedosa prueba de "defensa planetaria" que debería permitir proteger mejor a la humanidad de una eventual colisión devastadora con un objeto cósmico. Este hito pudo ser seguido por multitud de observatorios astronómicos, entre los que había creado gran expectación.
La nave, más pequeña que un automóvil, se estrelló a más de 20.000 kilómetros por hora contra su objetivo, al que alcanzó a la hora prevista, las 01:14 CET del martes. Y los equipos de la NASA, reunidos en el centro de control de la misión en Maryland, estallaron de felicidad ante las imágenes espectaculares del asteroide Dimorphos acercándose hasta poco antes del impacto. En la transmisión en vivo se podían distinguir claramente las rocas en la superficie gris del asteroide situado a unos 11 millones de kilómetros de la Tierra.
Es la primera vez en la historia de la humanidad que se intenta cambiar la trayectoria de un cuerpo celeste, en un intento de proteger a la Tierra de meteoritos similares al que hace 66 millones de años provocó la extinción de los dinosaurios. No obstante, ninguno de los asteroides conocidos amenaza a la Tierra durante los próximos 100 años.
"Nos embarcamos en una nueva era, en la que tenemos potencialmente la capacidad de protegernos de un impacto de asteroide peligroso", declaró Lori Glaze, directora de ciencias planetarias de la NASA. Dimorphos mide unos 160 metros de diámetro y no representa ningún peligro para nuestro planeta. Es en realidad es satélite de otro asteroide más grande, Didymos, alrededor del cual giraba en órbita en 11 horas y 55 minutos. La NASA buscaba reducir su órbita en unos 10 minutos para acercarlo a Didymos.
La misión de 330 millones de dólares, con unos siete años de desarrollo, fue diseñada para determinar si una nave espacial es capaz de cambiar la trayectoria de un asteroide a través de la pura fuerza cinética. La sonda despegó hace casi un año. "La NASA trabaja en beneficio de la humanidad, por lo que para nosotros es el cumplimiento final de nuestra misión hacer algo como esto: una demostración de tecnología que, quién sabe, algún día podría salvar nuestro hogar", dijo la administradora adjunta de la NASA, Palm Melroy, una astronauta jubilada, minutos después del impacto.
Serán necesarios varios días o quizá semanas para que los científicos puedan confirmar que la trayectoria del asteroide realmente cambió, y lo harán gracias a telescopios en la Tierra que observarán el cambio de brillo cuando el pequeño asteroide pase delante o detrás del grande. Aunque el objetivo sigue siendo modesto en comparación con el de películas de ciencia ficción como "Armageddon", esta misión de "defensa planetaria" bautizada como Dart (dardo) permite a la NASA entrenarse en caso de que un gran asteroide amenace un día con impactar la Tierra.
Fue el propio administrador de la NASA, Bill Nelson, quien hizo la comparación en Twiiter con la película "Armageddon", aunque explica que aquí el objetivo era desviar y no destruir el meteorito, ya que un fuerte impacto podría acabar en desastre con cientos de rocas cayendo sobre la Tierra. De hecho, las simulaciones no siempre habían terminado bien.
Retrasado de nuevo el lanzamiento del Artemis I por el huracán Ian
Otra misión con una ejecución a más corto plazo, las pruebas de lanzamiento para volver a la Luna, fue retrasado de momento por el paso del huracán Ian tras varios despegues cancelados. La NASA comunicó que será "difícil" realizar el lanzamiento de prueba no tripulado antes de noviembre. El cohete, el más potente jamás diseñado por la NASA, fue devuelto la noche del lunes a su hangar el Centro espacial Kennedy, Florida, para resguardarlo del ciclón, que se espera impacte hoy (28.09.2022) en este estado del sureste de Estados Unidos.
Los próximos períodos posibles de despegue, determinados según las posiciones de la Tierra y la Luna, se extienden del 17 al 31 de octubre, y luego del 12 al 27 de noviembre. "Sabemos que lo más pronto posible es a fines de octubre, pero lo más probable es que lo hagamos a mediados de noviembre", dijo a la televisión estadounidense el jefe de la NASA, Bill Nelson.
lgc (afp/efe/rtr)