Patrimonio de la Humanidad en peligro
Valiosas piezas del Patrimonio Cultural de la Humanidad están en peligro. Fanáticos destruyen templos y ruinas históricas, especialmente en Siria e Irak. Pero el riesgo se extiende también a otros lugares del mundo.
Templos convertidos en ruinas
Cuando se derrumban las estructuras del Estado, es difícil proteger los tesoros arqueológicos. A los ladrones solo les interesa el valor material de los objetos, no su valor histórico. Los saqueadores abastecen un mercado ilegal hambriento de de piezas históricas.
Hacha robada
Esta hacha tiene 4.500 años. Una casa de subastas de Múnich la ofreció en 2004 sin contar con sus datos de origen. Supuestamente, fue robada de un museo. Por suerte, se logró preservarla, y siete años después fue devuelta a su país de origen, Irak. La UNESCO, la Interpol y la UNODC estiman que se ganan hasta 8.000 millones de dólares con la venta ilegal de antigüedades.
Saqueos en museos
Luego de la invasión de EE. UU., en 2003, el Museo Nacional de Irak fue saqueado, y al menos 15.000 objetos históricos fueron robados. También la organización Estado Islámico (EI) saquea museos, entre otros, el de Raqqa. Las ganancias derivadas de las ventas van a parar a manos del EI.
Destrucción de patrimonio cultural
La milicia terrorista Estado Islámico destruye sin miramientos el patrimonio cultural. Luego de invadir la segunda mayor ciudad iraquí, Mosul, hizo estallar brutalmente la tumba del profeta Jonás, construida en un lugar que había estado habitado desde el siglo VIII antes de Cristo.
"Limpieza" con aplanadoras
No solo en Cercano Oriente, sino también en África se destruye patrimonio cultural por razones pseudorreligiosas. Islamistas de Al Qaeda dejaron un conocido mausoleo de santos sufíes en Timbuctú, Mali, hecho cenizas.
Daños colaterales al patrimonio cultural
Además de la destrucción, la guerra amenaza los tesoros de la Humanidad. El uso de armamento, por ejemplo, en antiquísimos asentamientos de Siria, han causado un efecto devastador. Es el caso de la mezquita de los Omeyas, en Alepo, Siria. En la foto, la mezquita, todavía con su minarete de cerca de 900 años de antigüedad.
Acusaciones mutuas
En abril de 2013 se derrumbó el minarete de la mezquita de los Omeyas, en Alepo, Siria. Las tropas gubernamentales y los rebeldes se acusaron mutuamente de la responsabilidad por la destrucción de este templo histórico.