¿Primer ministro iraquí amenazado en Berlín?
3 de diciembre de 2004
Por medio de la intervención de llamadas telefónicas, la policía había obtenido varios indicios sobre posibles actividades terroristas en relación con la visita oficial de Alaui. Como medida preventiva ya se había cancelado una de las estaciones en el programa del jefe de gobierno iraquí. En la noche del jueves se concretaron los indicios sobre planes de un atentado contra su persona. En consecuencia, esta mañana unidades especiales de la policía realizaron razzias en nueve viviendas en Berlín, Stuttgart y Augsburgo, arrestando a tres iraquíes.
“Los allanamientos continúan”
Se sospecha que los tres detenidos pertenecen al grupo terrorista Ansar al-Islam y que hayan planeado un atentado contra el Primer ministro iraquí, durante su visita oficial de dos días a su colega alemán, Gerhard Schröder.
Según informó el fiscal federal general Kay Nehm “los allanamientos tienen por objetivo proporcionar pruebas sobre la existencia, estructura y modo operativo de la agrupación, así como obtener indicios sobre actividades terroristas concretas”. Nehm añadió que “los allanamientos no han concluido aún y ahora deben ser evaluados los datos recogidos”. Las autoridades alemanas observan desde hace algún tiempo ya al grupo terrorista Ansar al-Islam, responsable de varios atentados en Irak. Los detenidos serán presentados ante el juez mañana sábado, en la Corte Federal de Justicia, en Karlsruhe.
Máximas medidas de seguridad en Berlín
Luego de la llegada de Alaui a la capital alemana, fue declarado allí el máximo grado de seguridad. Las calles de acceso a la cancillería fueron clausuradas, dificultando en gran medida el tránsito. “El entorno de la cancillería tiene que quedar libre de personas”, explicaron autoridades armadas a los berlineses, que se mostraban sorprendidos y enojados por el caos de tránsito, que les impedía llegar puntualmente a su destino.
Schröder recibe a Alaui con honores
El Primer ministro iraquí fue recibido ayer con honores militares por el canciller Schröder. Las conversaciones entre ambos jefes de gobierno se centraron en la estabilización de Irak, la reconstrucción del país y el plan para afirmar la democracia. Alaui explicó que su país da gran importancia a las inversiones alemanas para la reconstrucción, así como al entrenamiento de las fuerzas de seguridad iraquíes, pero que en Irak nadie espera el envío de soldados alemanes.