¿Qué planes tiene Grecia sobre su deuda?
11 de febrero de 2015A partir de este miércoles (11.02.2015), a los bancos griegos les resultará más caro y difícil financiarse. El Banco Central Europeo ya no acepta deuda griega como garantía para sus créditos. La deuda soberana de Grecia, calificada como "basura" en los mercados financieros, había sido aceptada excepcionalmente, porque el país se encontraba dentro del programa de rescate del Eurogrupo y el Fondo Monetario Internacional y cumplía con ciertos requisitos de los acreedores. El programa de ayuda, que ya es el segundo, finaliza el 28 de febrero. Como el nuevo Gobierno griego anunció que no quería concluir debidamente el actual programa ni tampoco entrar en un nuevo, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, extrajo la conclusión de que debía atenerse a las reglas de su Banco: no habrá más dinero para los bonos griegos.
Para que los bancos griegos no tengan dificultades de pago, pueden recurrir al programa ELA, del Banco Central Europeo. El Banco Central de Grecia podrá prestar dinero a las entidades griegas, pero asumiendo el riesgo como propio y con intereses más altos. Peter Praet, economista jefe del Banco Central Europeo, dejó claro una vez más el martes (10.02.2015) durante un evento en Lisboa que el ELA es un programa de ayuda temporal, "un puente que ha de conducir hacia algún lado", dijo Praet. Por definición, el ELA no puede suponer un dispositivo de financiación permanente de Grecia. En caso de que a los titulares de cuentas bancarias en Grecia se les ocurra liquidar su saldo de forma rápida y masiva, las entidades tendrían serias dificultades. De momento, un alto cargo de un banco griego en Atenas aseguró a la agencia Reuters que la salida de capitales no ha aumentado en las últimas semanas.
El Eurogrupo espera propuestas de Grecia
La reunión de crisis de los 19 ministros de Finanzas de la Unión Europea se produjo en el marco de la acuciante situación financiera de Grecia. El presidente del Eurogrupo, el holandés Jereon Dijsselbloem, quiso conocer del nuevo ministro de Finanzas griego, Yanis Varoufakis, cómo se plantea el saneamiento financiero de su país. Varoufakis viajó por varias capitales europeas, pero el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, aseguró después del encuentro con su homónimo griego que no sabía exactamente qué es lo que este se proponía ni cómo iba a conseguirlo. Varoufakis, al igual que el jefe de Gobierno, Alexis Tsipras, se niega a aceptar un nuevo programa de ayuda con las condiciones actuales.
El ministro austríaco, Hans Jörg Schelling, criticó que Atenas no presentara propuestas concretas antes del encuentro. "Creo que no hay que ser impacientes" observó por su parte Christine Lagarde, directora del Fondo Monetario Internacional. Lagarde apuntó que las negociaciones con Atenas seguramente llevarán tiempo. Sus apreciaciones coinciden con las de otros representantes de Finanzas en Bruselas, que aseguraron que no esperaban decisiones de la reunión extraordinaria de hoy.
Voluntad de que Grecia permanezca en el euro
Lo que sí quedó claro en el encuentro es la voluntad común de los ministros de Finanzas de la Eurozona de que Grecia continúe en la moneda común. Eso sí, insistieron en establecer pautas estrictas en caso de que haya nuevos planes de rescate. "Tenemos el mismo objetivo: que Grecia permanezca en la Eurozona", dijo Pierre Moscovici, comisario de Economía de la Unión Europea, al inicio de la reunión extraordinaria.
Varoufakis mantuvo asimismo un encuentro con Christine Lagarde, que voló a Bruselas para unirse a la reunión, que ambos calificaron como "constructivo". "Son competentes, inteligentes y han pensado sobre sus problemas", dijo la directora del FMI a los periodistas. "Tenemos que escucharles, estamos empezando a trabajar juntos y es un proceso que comienza y va a durar algún tiempo", continuó Lagarde. Antes de la reunión, el rendimiento de los bonos griegos subió y su bolsa cayó, con los inversores preocupados de que un hipotético fracaso en alcanzar un acuerdo en las próximas semanas podría llevar a un default de la deuda griega y su salida del euro.