Redescubriendo similitudes

Financial Times, de Londres: "La química entre Merkel y Bush funciona visiblemente bien; muy al contrario de lo que sucedía con su antecesor, quien después de su abierta campaña electoral anti-estadounidense en 2002, fue prácticamente ignorado por la Casa Blanca. (...) Pero la química y los símbolos son sólo una componente de las relaciones. En lo que se refiere al caso Irán, Alemania promueve una política de "pequeños pasos" para evitar precisamente las "consecuencias severas" con las que amenaza Dick Cheney. Merkel es además instintivamente más pragmática frente al presidente ruso Vladimir Putin, de lo que lo es Estados Unidos.

Estados Unidos y Alemania tendrán también en el futuro posiciones distintas en lo que se refiere, por ejemplo, a la admisión de Turquía a la Unión Europea (Estados Unidos a favor, Alemania en contra) o las esperanzas de Ucrania de ser admitida en la OTAN (mismo caso). Pero Estados Unidos y Alemania redescubren los grandes avances que pueden lograr en campos de interés mutuo, si manejan sus diferencias de forma civilizada."

Una táctica fácil de adivinar

Braunschweiger Zeitung, de Braunschweig, Alemania: "Bush evidentemente no quiere echar más aceite al fuego en sus relaciones diplomáticas con Alemania y ha optado por seguir el camino que le recomiendan sus asesores. Se ha dedicado a alabar a Alemania hasta el límite de lo soportable. Repentinamente Alemania juega un rol central en la lucha contra el terrorismo internacional. También en lo que se refiere a la postura decidida de Alemania frente a Irán recibe aplausos. La táctica de Bush es fácil de adivinar: convencer. Las relaciones germano-estadounidenses son estables y lo seguirán siendo. Pero no gracias, sino a pesar de este presidente estadounidense."

EE.UU. necesita a Alemania

Stuttgarter Zeitung, de Stuttgart: "Independientemente de la decisión política en contra de la guerra, Gerhard Schröder no aportó, con su proceder extremo, a fomentar una disputa racional con Estados Unidos, que le permitiera influir en los acontecimientos. Angela Merkel tiene un tono mucho más conciliador, subraya las similitudes pero defiende, en el caso de Irán, su campo de maniobra. George W. Bush ha aprendido también que las crisis políticas de nuestro mundo no se pueden resolver en solitario y siempre a su favor. Necesita a Alemania."

Fricciones entre Moscú y Washington

Le Figaro, de París comenta las críticas hechas recientemente por Dick Cheney a la política rusa en cuanto a la venta de gas: "El tono agresivo debe analizarse desde una base muy especial. Sanciones contra Irán, reconocimiento de Hamas, futura Cumbre del G-8… temas de grandes diferencias entre Estados Unidos y Rusia. Sin embargo las fricciones llegan en un momento poco adecuado, pues especialmente el Cercano Oriente asemeja más que nunca a un polvorín. Dick Cheney con seguridad no es el mejor diplomático, pero ha dicho en voz alta lo que todo el mundo piensa secretamente."