Refugiados: acalorado debate en el Parlamento
11 de noviembre de 2015¿Y ahora qué sigue? El marco jurídico para la recepción de refugiados, en especial los de Siria, sufre cambios fuertes y constantes. El último se produjo cuando el ministro alemán del Interior, Thomas de Maizière, puso de nuevo en vigor la Convención de Dublín. Este asunto fue discutido de manera intensa en el Bundestag. En una sesión especial, parlamentarios alemanes tanto del gobierno como de la oposición hicieron llover críticas a los funcionarios federales.
“Falta de concepto y falta de cabeza” reprochó a las autoridades federales Luise Amtsberg, vocera de Los Verdes en temas relacionados con la política de asilo. La legisladora se mostró molesta por la intención de de Maizière de limitar a los refugiados el derecho a traer a sus familias a Alemania. El procedimiento formulado por el ministro del Interior implica plazos más largos de procesamiento de las solicitudes, con la consiguiente carga para las autoridades migratorias germanas. “Le debe quedar en claro que así solo se agravará la situación”, le dijo Amtsberg a de Maizière.
Ulla Jelpke, vocera de La Izquierda en asuntos de política nacional, aseguró que los obstáculos a la reunión de los refugiados con sus familias bloquea “la única vía legal” que éstas tienen para llegar a Alemania. Más mujeres y niños emprenderán la travesía por rutas llenas de riesgos, añadió Jelpke.
Más aplausos que Merkel
Por su parte, Thomas de Maizière justificó sus declaraciones y medidas relacionadas con el tema de los refugiados. ¿Por qué defiende hoy una posición distinta de la que proponía hace un año?, se le preguntó. “Porque la situación ha cambiado”, fue su respuesta. De manera inesperada, muchos refugiados sirios llegaron a la Unión Europea “y debemos evitar que la cifra de estas personas se triplique o cuadruplique a través de la reunión familiar”, aseveró.
Por estas palabras, el ministro del Interior recibió fuertes aplausos de los disputados de su partido, la Unión Cristiana Demócrata. En estos días, de Maizière parece captar más simpatías de los cristianodemócratas que la propia canciller y jefa del partido, Angela Merkel. El funcionario consideró que muchos de los refugiados que solicitan asilo dicen provenir de Siria sin que esto sea cierto. Por eso fue necesario reanudar las tomas de declaraciones verbales, indicó.
Una política cambiante
Hace un año, el ministerio del Interior decidió que los refugiados sirios tenían derecho a un proceso de solicitud por escrito conforme a los términos de la Convención de Ginebra. El pasado mes de agosto, el gobierno federal promovió reformas legales a fin de facilitar el proceso de reunión de los refugiados con sus familias, permitiendo a éstas viajar a Alemania.
Luego, los partidos del gobierno procuraron sacar adelante una norma que impediría durante dos años la reunión familiar. Finalmente, las autoridades germanas han tomado decisiones titubeantes en cuanto a la aplicación de la Convención de Dublín, que obliga a los refugiados a presentar solicitud de asilo en el primer país de la Unión Europea al que lleguen. Esto no es aplicable a Grecia, por donde atraviesa la mayor parte de los refugiados sirios hacia Europa.
En agosto pasado, la Oficina Federal para Migración y Refugiados (BAMF) informó que tal regla no sería aplicada en el caso de los refugiados sirios. Ahora, y de manera sorpresiva, el ministro del Interior anunció que se volvería a aplicar la Convención de Dublín en los casos de las personas que huyen de Siria. Aydan Özoguz, encargado de temas migratorios en el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), comentó así los vaivenes en la política de refugiados: “No puede ser que el ministro del Interior, cuya encomienda es mantener el orden, imponga el caos al cambiar las normas prácticamente todos los días.”