Reunificación: juntos, pero todavía no uno solo
28 de septiembre de 2015Joachim Gauck tenía razón. Cada vez hay menos diferencias entre “ossis”(apelativo de los alemanes del este) y “wessis” (referente a los del oeste). El presidente federal se mostró satisfecho cuando lo dijo y, entretanto, la tendencia dominante entre los alemanes refleja ese sentimiento de unión.
Tras un cuarto de siglo de reunificación alemana, sobre todo los jóvenes de menos de 30 años crecieron libres de prejuicios entre este y oeste, comprobaron los investigadores de opinión del instituto de investigación de opinión infratest-dimap. Para esta encuesta, realizada por encargo de Deutsche Welle, fueron consultados sobre la reunificación más de 1.000 alemanes mayores de 18 años .
Jóvenes optimistas
Los resultados del estudio arrojan un resultado positivo de la unificación entre los jóvenes de 18 a 29 años. El 90% de los encuestados está convencido de que la reunificación alemana podría ser un modelo para otros países.
Entre ese grupo de jóvenes, el 70% piensa que al final valió la pena y valora mejor sus resultados que sus padres o abuelos. Solamente el 58%, un porcentaje menor que entre los mayores, considera que todavía no se ha terminado el proceso. Entre los que no llegaron a conocer el Muro de Berlín, tampoco la pregunta sobre los costos supone mayores preocupaciones Únicamente un 30 considera que las cargas financieras fueron demasiado altas.
Con estos porcentajes de satisfacción, no es de extrañar que, en general, el balance de los encuestados sea positivo. Dos tercios no dudan en calificar de beneficiosa la reunificación y, entre grupos de otras edades, solo un la mitad piensa que trajo ventajas.
Diferenciación por la posición geográfica
Pese a que las cifras de desempleo siguen siendo más altas que en el este que en el oeste, las dos terceras partes de los ciudadanos de la antigua Alemania socialista también se muestran satisfechos por el resultado.
Ante la pregunta de si el proceso ya ha acabado, las diferencias entre ambas zonas geográficas son un poco más claras. Al este del Elba, los ciudadanos son más críticos que en la antigua Alemania Federal. Pero aun así, se sigue valorando el proceso de unificación como un hecho ejemplar.
Mientras los alemanes del este son un algo más reservados a la hora de opinar sobre la reunificación, sen el plano personal su juicio es mucho más positiva. Más de dos tercios admiten sus ventajas, si bien todavía uno de cada seis cree que la caída del muro le trajo inconvenientes.