Roger Moore: su carrera en imágenes
"James Bond" o "Simon Templar", Roger Moore siempre interpretó sus papeles con estilo, y un ápice de humor británico e ironía. He aquí algunas de las escenas más importantes de su vida cinematográfica.
Estrella con estilo
Roger Moore quería ser, realmente, pintor de brocha gorda, pero por esos días tuvo que enrolarse en el servicio militar. Una feliz coincidencia: en 1953, este británico de origen humilde se mudó a Estados Unidos. Allí empezó su gran carrera en el cine que lo convirtió en estrella internacional.
"Simon Templar": el salvador de damas
Roger Moore, en su papel del cautivador detective Simon Templar, lucha contra gobernantes corruptos y narcotraficantes y resuelve casos en todo el mundo. De paso, salva a bellas damas de las más peligrosas situaciones.
"Dos tipos audaces": un tieso aristócrata
Roger Moore y Tony Curtis son los chicos cool de su tiempo: conducen coches lujosos y persiguen a gángsters. En el papel del rígido aristócrata Lord Brett Sinclair (Moore, izquierda) y el “playboy” Danny Wild (Curtis, derecha) se convirtieron en héroes de la serie de televisión "Dos tipos audaces" (1971-1972). El doblaje hecho en alemán se destaca por su buen humor y juegos de palabras.
"Vive y deja morir": un nuevo tipo de James Bond
Roger Moore es el primer verdadero inglés en el papel del agente 007. Moore sucedió a Sean Connery en 1973 con la película “Vive y dejar morir”. En ella, Moore le inyecta a dicho agente una nueva imagen: en lugar de cigarrillos, fuma cigarro, bebe whisky de marca Bourbon en lugar de Martini y siempre juega con un guiño de humor británico.
"Moonraker": James Bond en el espacio
La cuarta película de Bond con Roger Moore en el papel principal reanima el negocio de las franquicias: "Moonraker", estrenada en 1979, es uno de los capítulos más exitosos de la serie. La trama: una nave espacial es secuestrada y 007 debe recuperarla. Moore encarna la soberanía de un agente británico: elocuente salvador del mundo, al que no se le ve una sola gota de sudor.
Una estrella en el Paseo de la Fama
Roger Moore fue honrado con una estrella en el llamado “Walk of Fame” en octubre de 2007. En 2003 recibió, además, la Orden Alemana del Mérito, entre otros, por la promoción de la hermandad germano-británica. En el mismo año, la reina Isabel le entregó el título de “caballero”, pasando así a ser “noble”. Como actor, recibió en 1980 el Globo de Oro en calidad de "Preferido del mundo del cine".
Compromiso con los desfavorecidos
Roger Moore fue embajador de buena voluntad de Unicef desde 1991 y utilizó su popularidad para recaudar dinero a favor de los niños. Su trabajo por la atención a los niños desprotegidos se convirtió en su obra social más importante. En 1992 recibió por ello el premio alemán de Cámara de Oro. Unicef honró a Roger Moore como un "verdadero amigo" de los niños de todo el mundo. Max Hunger (JOV/DZC)