Schalke contra Werder Bremen: la cumbre de la desesperación
25 de septiembre de 2020Schalke 04 y Werder Bremen se enfrentarán este sábado, en el partido estelar del día en la Bundesliga. El encuentro se realizará en la casa de los mineros: el estadio Veltins Arena de la ciudad de Gelsenkirchen. La situación de ambos clubes es muy complicada, y los lastres del torneo anterior se hicieron visibles en la primera jornada del actual.
Contando el torneo anterior, Schalke lleva 17 partidos sin conocer la victoria. La segunda ronda fue fatídica. En todo el torneo, Schalke ganó solo 9 partidos, la mayoría en la primera ronda. La diferencia de goles fue brutal: -20, lo cual habla de un déficit enorme a la defensiva.
Esperanza rota
Se esperaba que con la nueva temporada las cosas cambiarían, pero la goleada 8-0 que le impuso el Bayern en la primera jornada fue un amargo regreso a esta misma realidad. El club de Gelsenkirchen parece metido en un atolladero, sin que se vea una salida clara: las finanzas del equipo no dejan lugar a la esperanza de comprar jugadores de primera clase. Y algunos de los mejores mineros del torneo anterior emigraron a otros clubes.
Las lesiones son otro de los factores que han afectado mayormente al Schalke. El problema fue tan grande, que parte del cuerpo médico del equipo fue despedido en la pausa de verano. Contra el Bayern, sin embargo, continuaron las bajas, siendo la más sensible la de Suat Serdar, el máximo goleador del Schalke el torneo anterior. Serdar no jugará contra el Werder Bremen, debido a su nueva lesión en el muslo.
De todo esto podría surgir algo bueno. La situación de Schalke es tan claramente calamitosa, que podría resultar un incentivo para la única solución visible: la unión incondicional del equipo. Como sea, el técnico David Wagner y la directiva se han impuesto para esta temporada una meta discreta: Schalke, que todavía en el torneo 2017/2018 acabó segundo en la tabla y jugó la Champions League, ahora se dará por satisfecho si acaba entre los primeros diez.
Salvación sin honra
La situación del Werder Bremen no es menos dramática. El club en el que alguna vez militaron glorias del fútbol como Miroslav Klose y Claudio Pizarro, logró mantenerse el torneo anterior en la primera división del modo más ignominioso: ganando a duras penas el repechaje a Heidenheim, no por haber metido más goles, sino gracias a la regla del gol visitante.
La de Bremen fue la segunda peor defensa de todo el torneo, superada solo por la de Paderborn, que se hundió en el purgatorio de la segunda división. La primera jornada de la nueva temporada hizo reaparecer los negros nubarrones. En casa, Bremen fue claramente superado por un Hertha Berlín implacable, que le impuso un 4-1 revelador. De todos los clubes de la Bundesliga, solo Schalke encajó más goles que Werder Bremen en la jornada anterior. Para este equipo, la ruta luce cuesta arriba, y también se dará por bien servido si logra permanecer fuera de la zona de descenso.
La esperanza nunca muere
Las esperanzas de Schalke están puestas en la flamante contratación del portugués , delantero procedente del Eintracht Frankfurt. Además, los mineros recuperaron en la portería a Ralph Fährmann. A pesar de haber recibido ocho goles contra el Bayern, el arquero es confiable bajo los postes, y un líder en la cancha.
En cuanto a Bremen, el atacante Davie Selke ya demostró ante Berlín que tiene hambre de gol. Contra Berlín, el equipo dejó en claro que tiene empeño, aunque le falta definir ante la portería contraria. El estadounidense Joshua Sargent hizo una buena pretemporada, y ya anotó en la actual Copa Alemana.
Con todo y estos anhelos, Schalke y Werder Bremen coinciden por el momento en su crispante desesperación. Para ambos, la necesidad de cambio es urgente. De otro modo, no habrá manera de parar la caída libre. Si la debacle es total, será imposible que Bremen repita la permanencia, y que Schalke evite el sótano de la tabla.