Terremoto político en el Medio Oriente
27 de enero de 2006The Independent opina: "El mundo venía pidiendo desde hace mucho tiempo democracia a los palestinos. Ahora ahí la tiene. Naturalmente esperamos que Hamás consiga seguir el irrefrenable camino político hasta el final. Hay signos alentadores de que ya se encuentra en esa vía. Comprendemos los temores de que aquellos que consideran peligroso este resultado electoral tanto para los palestinos como para los israelíes. Pero, a fin de cuentas, las reacciones encontradas que ha provocado el desenlace de estos comicios en el resto del mundo no son lo que importa. La voz democrática del pueblo palestino debe ser escuchada. Y tenemos que asumir ahora la nueva realidad."
El dilema europeo
El Corriere della Sera, de Milán, apunta: "Con el 'terremoto del Medio Oriente' se agudiza el dilema para los europeos: a partir de ahora será imposible ignorar a las fuerzas de Hamás, pero intentar utilizar con ellas la diplomacia tradicional de la Unión Europea -es decir, zanahoria sin garrote, negociaciones y ayuda financiera- podría llevar a la catástrofe. (...) La Unión Europea debe tratar a Hamás en forma decidida, dispuesta a reaccionar a cualquier apertura, pero firme ante el odio, la violencia y el terrorismo. Por difícil que parezca, ese es el único camino que conduce hacia la tan lejana paz."
Papel clave para Europa
El Salzburger Nachrichten, de Salzburgo, comenta: "También los nuevos gobernantes necesitarán la ayuda de la comunidad internacional. Mientras no abjuren de la violencia, tendrán que contar con que no siga fluyendo el dinero. Eso dota a la Unión Europea, que es la que más apoyo financiero da a los palestino, de una palanca política y le confiere así, por primera vez, una posición clave en el conflicto del Medio Oriente."
El terrorismo no es alternativa
El Südeutsche Zeitung, de Múnich, señala: "Quien está en el gobierno no puede columpiarse entre sesiones de gabinete y una guerra clandestina, entre la negociaciones de tratados y el terrorismo. Quien gobierna se compromete. El terrorismo no es alternativa para ningún gobierno palestino, ni siquiera para Hamás: el poderío militar israelí es demasiado avasallador. Ya una vez fue bombardeada la sede del presidente palestino. Si Hamás asume responsabilidades de gobierno, los islamistas tendrán que buscar a fin de cuentas el diálogo."
Constelación paradójica
Le Figaro, de París, indica: "La situación es paradójica: después de que la comunidad internacional no estuvo en condiciones de fortalecer a una OLP laicista y moderada, que se veía enfrentada a los fundamentalistas de Hamás, las circunstancias la instan ahora a ayudar a los fundamentalistas a gobernar. (...) Sea como fuere, se ha comprobado que la democracia en el Medio oriente no es instrumento suficiente para combatir el terrorismo ni para defender valores preciados para Occidente. (...) El desconcierto y la preocupación con que se recibió en Israel el arrollador triunfo de los radicales islámicos resulta muy comprensible. Ehud Olmert y su nuevo partido de centro, Kadima, se ven confrontados con una verdadera crisis que fortalecerá a sus adversarios en la antesala de las elecciones parlamentarias planeadas para marzo."