Terrorismo y narcotráfico: Unión Europea vigilará transacciones
26 de julio de 2005
La lucha contra el terrorismo y el narcotráfico cobra, cada vez, un precio más alto. El control policial aumenta en Europa, no sólo en las calles y sistemas de transportes con más presencia de agentes y cámaras de televisión. Los gobiernos europeos, hasta ahora escépticos, han confirmado la voluntad de hacer más transparente el mundo de las finanzas. Con este paso, Bruselas pretende "sellar las fuentes de financiación del terrorismo internacional".
Rumbo a la transparencia
Según el borrador de la reglamentación presentado por el Comisario de Interiores, Charlie McCreevy, los datos personales del remitente y tanto del destino como del destinatario de todos los giros bancarios hacia y desde la Unión Europea serán registrados, almacenados y utilizados en caso de sospecha de que las personas y el dinero tengan que ver con terrorismo y/o narcotráfico.
Los institutos de crédito deberán comunicar a la policía e instituciones investigativas las informaciones recolectadas cuando exista sospecha de lavado de dinero y/o conexiones con terrorismo y narcotráfico.
Sin identificación no hay transacción
Para efectuar transacciones dentro de la Unión Europea bastarían el nombre del pagador y su número de cuenta bancaria. "En caso de que el banco receptor exija más informaciones, las personas involucradas están obligadas a entregarlas", comentó una experta financiera de la Comisión Europea. Hasta ahora el banco del destinatario sabía poco sobre la persona que ejecuta los envíos.
El seguimiento y entrega de informaciones se hará sin importar la cantidad de dinero en cuestión, porque "también con bajas cantidades se puede financiar el terrorismo".
Abogados, notarios e inmobiliarias
Pero las nuevas reglamentaciones no sólo le competen a los bancos y casas de giros bancarios, sino también a abogados, notarios, comerciantes de inmuebles y dueños de casinos. Todos ellos estarán obligados a establecer la identidad de los participantes en transacciones mayores de 15.000 euros. Es más, en caso de que alguno de los profesionales llegase a tener sospechas sobre la proveniencia o la destinación del dinero en cuestión, deberán reportarlas a las autoridades.
Se espera aprobación de Consejo y Parlamento
La Gran Bretaña, que preside actualmente el Consejo de la Unión, pondrá en debate el tema y espera lograr su aprobación por parte del Consejo de Ministros de Finanzas hasta finales de año. Pero el Parlamento Europeo tiene también partido en el asunto y la decisión tendrá que ser ratificada por dicho órgano.
La vigilancia de la transferencia de dinero es, realmente, parte del Plan de Acción contra el Terrorismo que la Unión Europea despidió tras los hechos violentos del 11 de septiembre y que desde entonces ha venido adaptándose a la coyuntura. Lo nuevo ahora es que los gobiernos nacionales se hayan comprometido a adelantar la propuesta que entraría en práctica a partir del 1° de enero de 2006.