"The Guardian": Reino Unido espió a los delegados del G20
17 de junio de 2013Se monitorearon las comunicaciones por Internet y se escucharon llamadas telefónicas, informa el periódico The Guardian en base al testimonio de Edward Snowden, un exempleado de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) estadounidense y los documentos a los que tuvieron acceso sus reporteros.
La vigilancia se realizó en cibercafés instalados por los propios servicios de inteligencia para que los delegados enviaran sus mensajes. De esta forma, el Government Communications Headquarters (GCHQ), el equivalente británico a la NSA, podía seguir el intercambio de emails y descubrir las palabras clave de las cuentas.
El objetivo del espionaje, dirigido contra países aliados, como Turquía y Sudáfrica, era mejorar la posición negociadora de Reino Unido durante la cumbre, conociendo de antemano los planes de las otras delegaciones, y no afrontar ningún riesgo para la seguridad, añade el informe.
Gobierno británico se niega a comentar revelaciones
"The Guardian" añade que las revelaciones seguramente causarán tensiones entre los delegados presentes este lunes y el martes en Lough Erne, Irlanda del Norte, para asistir a la cumbre del G8.
El gobierno británico se negó a comentar las revelaciones, alegando que no hace declaraciones sobre temas de seguridad. Entre los objetivos del espionaje estuvo también el entonces presidente ruso Dimitri Medvedev, a quien se realizaron escuchas telefónicas.
Unos 45 analistas estaban informados las 24 horas acerca de quién hablaba por teléfono con quién. Entre otras cosas, tenían acceso al intercambio móvil entre los delegados. Al cierre de la operación, la misma fue elogiada por los superiores, apunta el "Guardian". El primer ministro de entonces, Gordon Brown, estaba informado de lo que ocurría.
Snowden reveló ya la semana pasada un masivo programa de vigilancia del gobierno estadounidense tanto de las comunicaciones telefónicas como por Internet de sus ciudadanos. El "Guardian" trabajó en exclusiva con él para publicar los documentos. El ex analista de 29 años se encuentra refugiado en Hong Kong en paradero desconocido.
CP/EL (dpa, afp)