Lo que hay que saber sobre el vertido de agua de Fukushima
13 de abril de 2021El Gobierno japonés formalizó este martes (13.04.2021) su decisión de evacuar en el océano más de un millón de toneladas de agua tratada pero todavía radiactiva de la devastada central nuclear de Fukushima Daiichi, una operación que podría durar décadas.
Las autoridades y los expertos científicos aseguran que este vertido en el océano Pacífico no supone riesgos para la salud de las personas ni para el medio ambiente, pero las oenegés y los pescadores locales se oponen tajantemente al proyecto. China y Corea del Sur también están descontentas.
Alrededor de 1,25 millones de toneladas de agua contaminada están almacenadas en más de 1.000 cisternas cerca de la central nuclear de Fukushima Daiichi, en el noreste de Japón, devastada por un terremoto y un tsunami el 11 de marzo de 2011.
¿De dónde sale el agua contaminada?
Se trata de agua marina empleada para refrigerar los reactores dañados tras las fusiones parciales de núcleo provocadas por el terremoto y el tsunami de 2011, y que queda contaminada de isótopos radiactivos. A esta agua se añade la que se filtra desde el subsuelo hacia las instalaciones nucleares y también resulta contaminada.
¿Se trata de agua radiactiva?
Antes de ser vertida, el agua es tratada con un Sistema Avanzado de Procesamiento de Líquidos (ALPS, por sus siglas en inglés), para eliminar la mayoría de las sustancias radiactivas (radionucleidos), pero no el tritio, que no se puede quitar con las técnicas actualmente disponibles.
¿Qué es el tritio?
El tritio es un isótopo radiactivo del hidrógeno generado como subproducto de los reactores nucleares de fisión. También se genera de forma natural en la atmósfera, y va a parar al agua de lluvia o al agua potable.
¿Es peligroso para la salud humana?
El tritio solo es peligroso para la salud en dosis muy altas, según los expertos. Se desintegra en un 50 % al cabo de unos 12 años (de una a dos semanas en el cuerpo humano) emitiendo radiación beta de baja energía. Así, el tritio, en concentraciones bajas similares a las existentes en la naturaleza, representa un nivel desestimable de radiotoxicidad. Los niveles de este elemento en el agua que se verterá al mar serán cuarenta veces inferiores al tope legal establecido por el Gobierno de Japón para el agua potable, y 1/7 del máximo fijado por la Organización Mundial de la Salud, según datos del Ejecutivo.
¿Por qué se tira al mar?
El agua procesada se viene almacenando en bidones dentro de las instalaciones de Fukushima Daiichi, pero el espacio para los mismos se agotará hacia mediados del próximo año. Las autoridades niponas se han decantado por verterla al mar tras estudiar otras medidas como evaporarla o inyectarla en depósitos en el subsuelo, descartadas por su complejidad técnica y su elevado coste.
¿De cuánta agua se trata?
Actualmente hay más de 1,25 millones de toneladas de agua almacenada en la central. Esta cantidad se incrementa al ritmo de unas 140 toneladas por día.
¿Quién se opone al vertido?
Organizaciones ecologistas como Greenpeace afirman que el agua de Fukushima contiene otros elementos radiactivos como el carbono 14, con el riesgo, según ellas, de entrar en la cadena alimentaria y dañar el ADN si las dosis se acumulan a largo plazo.
Estas oenegés defienden un almacenamiento sostenible hasta que mejore la tecnología de filtración de agua.
Shaun Burnie, especialista nuclear de Greenpeace, declaró a DW que los vertidos de Fukushima no podían ser seguros. "La alternativa clara ha existido durante años, y es el almacenamiento a largo plazo", dijo Burnie, y añadió que el Gobierno japonés había dicho previamente que habría espacio disponible fuera de la planta nuclear de Fukushima para almacenar sus residuos.
El vertido de los residuos de Fukushima liberará materiales radiactivos, incluido el tritio, que, en algunos porcentajes, podría "unirse orgánicamente" a las células humanas o a las de los peces, dijo Burnie. "Pero otros isótopos radiactivos, como el estroncio 90, que podrían ser liberados por estos vertidos, se concentran en los huesos tanto de los peces como de los humanos, aumentando los riesgos de cáncer", añadió.
"Cualquier radiactividad que se libere en el medio ambiente tendrá una consecuencia... [no] significa que haya una inevitabilidad que garantice que tendrá un efecto de cáncer en la salud, pero aumenta la carga de radiación y eso no es aceptable", aseguró a DW.
Por su parte, asociaciones de pescadores de Fukushima lo han rechazado porque creen que dañará aún más la reputación de los productos locales, que acarrean el estigma radiactivo desde el accidente de 2011. Además, China, Corea del Sur y Taiwán han protestado por los planes de Japón, al considerar que el agua de Fukushima podría representar un riesgo para la salud humana y para el medio ambiente.
¿Cómo se va a tirar el agua?
Tras la decisión del Gobierno, la operadora de la planta procederá a los preparativos técnicos necesarios para canalizar hacia el mar el agua almacenada. Está previsto que empiece a verterse hacia 2023.
¿Es el primer vertido de este tipo?
Los vertidos controlados de agua o vapor de agua con tritio procedente de centrales nucleares son habituales. En la última década, países como Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Francia, China y Corea del Sur los han realizado, en ocasiones con concentraciones de tritio mayores que las previstas en Fukushima.
¿Cuál es la situación en la planta de Fukushima Daiichi?
La central se encuentra en la primera fase de su proceso de desmantelamiento, consistente en la descontaminación de la zona y la retirada del combustible nuclear de los reactores menos afectados por el accidente. Se prevé que el desmantelamiento se complete entre 2041 y 2051.
FEW (EFE, AFP, DW)