Trump y el clima
1 de junio de 2017Angela Merkel había dejado de hacerse ilusiones desde hace días. "Toda la discusión sobre el tema del clima fue muy insatisfactoria”, dijo la canciller alemana, con sorprendente claridad, tras la cumbre del G7 en Italia. Sus palabras no sonaban muy optimistas. Y ahora, Donald Trump da efectivamente la espalda al acuerdo.
Alcanzado en diciembre de 2015 tras arduas negociaciones en París, el acuerdo prevé que los países contribuyan a limitar el calentamiento global a un máximo de dos grados – o menos si es posible- mediante medidas voluntarias. También Estados Unidos, gobernado entonces por Barack Obama, dio su aprobación. Diez meses después, poco antes de la elección de Donald Trump, Washington ratificó el acuerdo, al mismo tiempo que China, otro de los grandes emisores de gases de efecto invernadero. Entretanto, 145 países de la ONU han rubricado el acuerdo, que tiene una peculiaridad: el compromiso de París de presentar un plan nacional contra el cambio climático es vinculante, no así el cumplimiento del plan de cada país. De esta forma fue posible que el gobierno de Obama pudiera adherirse al acuerdo, sin tener que consultar al Congreso, notoriamente escéptico en la materia.
Plazos para rescindir el acuerdo
Donald Trump no atribuye ninguna importancia a la protección del clima, eso es un hecho. Las reglas establecen que un país puede rescindir el acuerdo solo después de tres años; otro año tomaría aclarar todas las interrogantes pendientes. Dicho en otros términos: Trump podría anunciar su "triunfo” sobre los ambientalistas solo si es reelegido como presidente de Estados Unidos.
A diferencia de lo ocurrido en años anteriores, y pese al anuncio de Trump de que posiblemente renegociaría acuerdo de París, el No de Estados Unidos aumenta más bien la cohesión del resto de las naciones en cuanto a la protección climática. La Unión Europea y China quieren renovar explícitamente su compromiso con el acurdo de París, y también India mantiene su apoyo a lo convenido. Pero todos tendrán que asumir gastos adicionales: según el acuerdo de París, hasta 2020 habrán de ponerse 100.000 millones de dólares a disposición de los países más pobres, para la protección del clima; a partir de esa fecha, la suma aumentará. Estados Unidos no contribuirá. Y principalmente Europa, China e India, pero también otros países emergentes, como Sudáfrica y Brasil, tendrán que suplir la ausencia estadounidense.