Ucrania, la prohibición de la Iglesia ortodoxa y la UE
28 de agosto de 2024Las organizaciones religiosas de Ucrania pronto dejarán de poder cooperar con la Iglesia Ortodoxa Rusa. La prohibición se dirige efectivamente contra la Iglesia ortodoxa ucraniana del Patriarcado de Moscú, una iglesia subordinada a la Iglesia Ortodoxa Rusa hasta 2022, cuando se separó unos tres meses después de la invasión rusa de Ucrania. Si se trata de una separación seria o de mera palabrería forma parte del debate.
El proyecto de ley había causado polémica durante meses, incluso a nivel europeo. Sin embargo, cuando el Parlamento ucraniano lo aprobó el pasado 20 de agosto, no hubo ninguna reacción particular, ni de la Unión Europea ni de los demás socios occidentales de Kiev.
La UE dice que Ucrania garantiza la libertad religiosa
¿Es compatible la normativa con la libertad religiosa? La Constitución y las leyes de Ucrania garantizan el derecho a la libertad religiosa y de creencias, consagrado en el Convenio Europeo de Derechos Humanos y la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE, explica a DW Peter Stano, portavoz de la Comisión de Asuntos Exteriores de la UE. Stano se refiere así al informe de la Comisión Europea sobre Ucrania del 8 de noviembre de 2023.
"Hemos tomado nota", dice Stano, "de que el Parlamento ucraniano ha aprobado una ley que prohíbe las actividades de las organizaciones religiosas asociadas a la Iglesia Ortodoxa Rusa en Ucrania por razones de seguridad nacional y de prevención de injerencias extranjeras procedentes de Rusia...”.
Situación compleja
Al parecer, la UE no quiere implicarse en esta cuestión y no la convertirá en un factor central de las negociaciones de adhesión con Ucrania, sostiene Teona Lavrelashvili, del Centro Wilfried Martens de Estudios Europeos, consultada por DW.
Para la politóloga, la UE evalúa a los posibles Estados miembros basándose en los criterios de Copenhague. Para ello, concede importancia a la estabilidad de las instituciones, la democracia, el Estado de Derecho, los derechos humanos y la protección de las minorías.
"La prohibición de las organizaciones religiosas vinculadas a la Iglesia Ortodoxa Rusa en Ucrania puede cotejarse con estos criterios, especialmente en lo que respecta a la libertad religiosa y la libertad de asociación", declaró Lavrelashvili. En la práctica, sin embargo, hay que tener en cuenta que la situación en Ucrania es muy compleja.
Traición, colaboración y complicidad
Desde el comienzo de la invasión rusa, las autoridades ucranianas han iniciado más de 100 procesos penales contra sacerdotes de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana del Patriarcado de Moscú. Según el servicio de seguridad ucraniano, 26 de ellos han sido condenados, la mayoría por alta traición, colaboración con Rusia y complicidad.
La Iglesia Ortodoxa Rusa califica la invasión de Ucrania de "guerra santa" y propugna que todo el territorio de Ucrania "debe quedar bajo la esfera de influencia exclusiva de Rusia". Por ello, Kiev considera a esta Iglesia un brazo ideológico del Kremlin y cómplice de crímenes de guerra.
Seguridad nacional sobre libertad religiosa
La intención de la UE es obvia, dice Teona Lavrelashvili. "En el contexto de la guerra, la UE calificará las medidas de Ucrania de actos simbólicos que demuestran el deseo de Kiev de independizarse espiritualmente de Moscú".
En opinión de Dmytro Vovk, profesor de Derecho y experto en religión de la Universidad de Derecho Nacional Yaroslav Mudryi de Járkiv, quien actualmente imparte clases en Nueva York, es probable que la ley no obstaculice la integración europea de Ucrania.
Lavrelashvili, no obstante, puntualiza que Bruselas deberá exigir entonces garantías a Kiev, si continúan las negociaciones sobre la adhesión de Ucrania.
(aag/ers)