Un camino que pasa por dos estados
9 de septiembre de 2003"Cada jefe de gobierno palestino será juzgado por sus actos", dijo el ministro del Exterior israelí Silvan Schalom, aludiendo a la postura del candidato a primer ministro palestino, Ahmed Korei, frente a los grupos extremistas islámicos. "Korei debe tomar la decisión estratégica de destruir la infraestructura terrorista, con ello mostrará si está del lado de Arafat o contra el terrorismo", recalcó Shalom, ministro en funciones debido a que el primer ministro israelí, Ariel Sharon, se encuentra de visita en la India.
"No bajo mandato israelí"
No es ninguna decisión fácil para Korei, una de las figuras más cercanas a Yasser Arafat a quien ha mantenido una lealtad inquebrantable desde el movimiento Fatah de los años 60.
Korei, actual presidente del Parlamento palestino, dio la noche del lunes su ‘acuerdo de principio’ para convertirse en primer ministro, pero bajo ciertas condiciones. Pidió garantías a Europa y Estados Unidos de que apoyarán el Mapa de Ruta con el cual se busca solucionar el conficto entre Israel y Palestina. También exigió a Israel un cambio en su política que incluya un alto al fuego y retiro de los territorios autónomos. "No tendré éxito como primer ministro si Israel no abandona los ataques aéreos y las operaciones para matar o capturar a extremistas palestinos y si no levanta su cerco sobre el presidente Arafat", dijo. El político, también conocido como Abu Alá dijo haber dicho a los estadounidenses, árabes, rusos, a todo el mundo, que esta situación no puede continuar. "No estaré bajo el mandato israelí: ‘haga esto o haga lo otro’", declaró.
Guerra sin cuartel
Mientras tanto, Israel continuaba su guerra sin cuartel contra la resistencia islámica. Un niño de 12 años murió por las esquirlas de un proyectil disparado por un tanque israelí contra un edificio de viviendas en la ciudad de Hebrón, según agencias. Tropas israelíes que amenazan con dinamitarlo, tienen cercado a un número indeterminado de milicianos del Movimiento de la Resistencia Islámica (HAMAS). El cese total de estas y otras operaciones militares de Israel en las ciudades y zonas autónomas de Cisjordania es una de las exigencias del primer ministro designado para asumir la formación del Gobierno de la Autoridad Nacional Palestina, ANP.
Callejón sin salida
La dimisión de Mahmud Abas, del cargo de primer ministro palestino, anunciada el sábado pasado, respondió al evidente fracaso en el avance del plan de paz. Buena parte de ello se debe no sólo a la tibia actuación de Washington, que no presionó realmente a Israel a retirarse de los territorios ocupados o para que abriera una posibilidad real para la existencia de un estado palestino. El primer ministro israelí, Ariel Sharon, condicionó el regreso a las negociaciones de paz con la ANP a que Abas combatiera a los integristas islámicos y a otras facciones armadas. El jefe del gobierno palestino optó por negociar con los grupos armados de la resistencia una tregua, que fue proclamada el pasado 29 de junio y que quedó sin efecto tras el asesinato de uno de sus dirigentes políticos, Ismail Abu Shanab. Fue la reacción de Israel al atentado de un suicida de HAMAS contra un autobús que costó la vida a 22 personas.
Abu Alá se ha pronunciado contra una tregua unilateral como la que negoció Abas con las facciones islámicas de la resistencia.
No abandonar la Hoja de Ruta
El ministro alemán del Exterior, Joschka Fischer, exhortó a israelíes y palestinos a no abandonar la Hoja de Ruta para la pacificación de Oriente Medio. "Tenemos que mantener el apoyo a la aplicación de la Hoja de Ruta. El proceso de pacificación de la región sólo es posible si la Unión Europea y Estados Unidos unen esfuerzos" dijo. Durante una conferencia de embajadores celebrada en Berlín, el ministro subrayó que en definitiva habrá que llegar al compromiso de crear dos estados, uno israelí y otro palestino.
Por su parte el experto para asuntos árabes de la Universidad de Maine, Guenter Meyer, afirmó que lo decisivo en esta crisis será el papel del gobierno de Bush. "Los estadounidenses hicieron promesas verbales de apoyo al saliente primer ministro palestino, pero no ejercieron suficiente presión sobre Israel para implementar la "Hoja de Ruta". Korei exige ahora que se implemente la "Hoja de Ruta", pero no es de esperarse que Sharon haga lo mismo", señaló.