Un humor distinto
9 de octubre de 2008
Seguramente, al lector de lejanas latitudes le dirá poco una lista de nombres como Lilo Wanders, Florian Schroeder o Tom Pauls. A los alemanes, la mención de tales personas les provoca sonrisas, puesto que se trata de conocidos humoristas que participan en la llamada Feria de la Risa (Lachmesse), en la ciudad de Lepizig.
Festival europeo
Se trata, de hecho, de un evento de mayores dimensiones y un nombre mucho más pomposo: Festival Europeo del Humor y la Sátira, que en 2008 cumple la mayoría de edad al celebrar sus 18 años.
Cuando de reír se trata, los alemanes se toman las cosas muy en serio. Recordemos que el Kabarett, como se llama en Alemania a la comedia de cámara, es todo un arte que vivió una época de esplendor en el Berlín de los años veinte.
La tradición de este género se ha expandido a todo el país, e incluye no solamente la comedia sino también el canto y el baile. Lo importante es que haya un escenario, artistas con talento, y un público entusiasta y dispuesto a participar en la función.
La comediante Anka Zink, por ejemplo, presenta dentro de la Lachmesse un espectáculo en el que hace sátira acerca de la cultura del wellness. El dueto Stermann y Grissemann realiza lo propio, tomando como base los populares programas de cocina que se transmiten por la televisión germana.
Volker Diefes aborda con sentido del humor el fenómeno de la eterna adolescencia con las funciones de Hotel Mamá, mientras que Peter Bause se adentra en escenarios más escabrosos con su espectáculo El inodoro de la estación de trenes de Sylt.
La codiciada presea
Y ya que éstas y otras presentaciones se enmarcan en la esencia misma del espectáculo, no podían faltar la carpeta roja y las preseas de honor; claro, al amparo de la risa más sincera.
Así, cada año se otorgan en este festival del humor y la sátira los llamados Dientes de León (Löwenzahn), peculiares estatuillas con las que los comediantes se celebran a sí mismos y a su capacidad para jugar con la música, las palabras y las ideas.
En la Lachmesse 2008 participan 160 artistas de siete países. Al final, el festival habrá dado pie a un total de 96 funciones en once recintos teatrales. La gran gala tendrá lugar en la Ópera de Lepizig, imponente recinto en el que se encontrarán –o más bien dicho, chocarán- la elegancia y la sátira.
Ya en serio, puede decirse que este festival sirve para romper el molde de seriedad que muchos atribuyen a los alemanes como característica irremediable. Es cierto que muchos de ellos discuten demasiado y parecen reír poco.
Pero ello no es por falta de sentido del humor. Los alemanes lo tienen, pero de un modo ciertamente distinto. Es una alegría que invita a conocerla, y también a participar de ella. La cita de Leipzig lo confirma cabalmente.