Venezuela en emergencia: ¿Qué hacen los demás?
23 de febrero de 2015Colombia y Venezuela, otrora mejores socios comerciales de lado y lado, vivieron hace 5 años la peor crisis diplomática de su historia, debido al enfrentamiento entre sus presidentes Hugo Chávez (1999-2013) y Álvaro Uribe (2002 y el 2010), el uno hoy muerto, el otro parlamentario. Pero las duras críticas de Uribe al Gobierno socialista de Chávez le salieron caras a miles de trabajadores colombianos que fueron los que sufrieron los efectos del fuerte recorte comercial.
“Hoy, bajo el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, las relaciones entre Colombia y Venezuela son más tranquilas, aunque sus modelos de desarrollo sean distintos”, dice a DW el analista económico-político, Roberto Cajamarca Gómez, exdirector de Estudios Económicos de la Cámara Colombo-Venezolana. “Pero mientras el trato diplomático volvió a ser el de dos países “hermanos”, las relaciones comerciales nunca se recuperaron del golpe: el comercio bilateral de 8.000 millones de dólares, quedó reducido a la cuarta parte”, recuerda Cajamarca. Así, Santos prefiere la prudencia al empeoramiento de las cosas.
Oposición colombiana se dirige a la OEA
El reciente arresto del alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, empieza empero, a poner en alerta a muchos, dentro y fuera de Venezuela, al tiempo que Maduro revive la leyenda chavista de que en el exterior se está fraguando un supuesto golpe de Estado. Una acusación que solo el presidente colombiano salió a rechazar y aprovechó la oportunidad para pedir al Gobierno de Maduro garantizar los derechos de la oposición y juicios justos a Antonio Ledezma y Leopoldo López. En ese mismo sentido, la parlamentaria colombiana Claudia López, de Alianza Verde, expresó su "solidaridad total" con la oposición venezolana. Por su parte, el presidente del Congreso de Colombia, José David Name, del partido opositor del Centro Democrático, pidió a la Organización de Estados Americanos (OEA), convocar una reunión urgente de cancilleres.
Cajamarca Gómez recuerda que “Colombia prefiere ahora ser prudente y mantener cierto margen para propiciar el diálogo entre el Gobierno y la oposición venezolanos”, como ya lo ha hecho Colombia en el marco de Unasur, organización afín al chavismo que ha propuesto una reunión en Caracas.
Colombia, según el analista Roberto Cajamarca, “no quiere apresurarse a emitir ningún juicio y está esperando la decisión de los mismos electores venezolanos este año”. En Caracas se prevén elecciones parlamentarias en la primera quincena del próximo diciembre, sin que se publique aún una fecha exacta. “Los ciudadanos serán los que decidan si siguen apoyando el modelo chavista o le dan una oportunidad a la oposición”, resalta el analista político-económico colombo-peruano.
México, Perú, Argentina, Paraguay
“En la tónica colombiana de prudente espera, están también países como México y Perú, que han preferido dedicarse a la Alianza del Pacífico”, apunta Roberto Cajamarca y agrega que, Argentina, otrora muy cercana al Gobierno de Chávez, “tiene ahora sus propios problemas que ocupan a la presidenta Cristina Fernández”. En Paraguay, Óscar Tuma, del oficialista Partido Colorado, propuso a la Cámara Baja de su país que exija “la liberación de los presos políticos encarcelados en Venezuela”.
Silencio de ALBA como “señal positiva”
Por su parte, los países del ALBA, incluidos los primeros beneficiarios de Venezuela, como Cuba, Nicaragua, Bolivia y Ecuador, así como sus observadores, los regímenes iraní y sirio, han permanecido también muy callados ante el agravamiento de la crisis venezolana. “Pero el hecho de que Ecuador, Bolivia o Nicaragua no hayan salido a defender la captura del alcalde Ledezma puede ser una señal de que no necesariamente la aprueban. “Esta es una señal de que hasta en el ALBA, como en el consenso de la comunidad internacional, se considera que Maduro esta yendo demasiado lejos”, apunta Cajamarca, quien recuerda que Cuba, uno de los principales receptores de petróleo venezolano, “previó a tiempo el probable fin de esa fuente y ha empezado a reorientar su política hacia Estados Unidos”. EE.UU., por lo demás, sigue siendo el principal comprador de petróleo venezolano.
Europa debe ser más activo en defensa de derechos humanos
De Europa, en especial de la Unión Europea, el exdiplomático Roberto Cajamarca Gómezno espera más que “una mayor preocupación por los derechos humanos en Venezuela y ninguna injerencia política, como tampoco debe venir ni de EE.UU. ni de otra parte".
Bruselas tendrá, por lo visto, suficientes oportunidades para hacerlo: el líder del partido socialdemócrata Acción Democrática (AD) de Venezuela, Henry Ramos Allup, informó que el diputado Julio Borges podría ser despojado de su investidura parlamentaria en la sesión de este martes, para después ser encarcelado. Este sería el cuarto parlamentario de la oposición impedido por el Gobierno de Maduro.