OTAN: servicio militar obligatorio en el flanco oriental
25 de junio de 2024Maxim, de Vilnius, cumplirá pronto 22 años. Es ciudadano lituano y proviene de una familia de habla rusa. El año pasado fue llamado a un servicio militar de nueve meses. Su servicio militar lo enfrentó a personas que difícilmente habría conocido fuera de las Fuerzas Armadas. Estaba destinado en una brigada de infantería en Tauragé, una pequeña ciudad en el suroeste de Lituania, no lejos de la frontera con el enclave ruso de Kaliningrado.
Dentro de dos años, probablemente muchos ciudadanos lituanos de entre 18 y 22 años tendrán experiencias similares. La decisión de este mes del Seimas -el Parlamento unicameral lituano- de reinstaurar el servicio militar obligatorio universal no fue una sorpresa. El debate al respecto comenzó en febrero de 2022, tras el ataque de Rusia a Ucrania.
Convocatoria por generador aleatorio
Cuatro años después de unirse a la OTAN en 2008, Lituania había abolido el servicio militar obligatorio y pasó por completo a un Ejército profesional. Pero, tras la anexión de la península ucraniana de Crimea por parte de Rusia, en 2014, Lituania fue el primer país de Europa en revivir el servicio militar obligatorio, en 2015. Sin embargo, solo eran llamados aquellos cuyos nombres aparecían en una lista generada al azar por computadora. Ese fue el caso de Maxim.
La nueva decisión parlamentaria mantiene este período de servicio de nueve meses, pero amplía el servicio alternativo de diez meses a un año. En el futuro, será imposible asistir a la universidad sin haber servido primero. Los primeros procesos de reclutamiento están previstos para 2025, y el primer llamado a filas para 2026.
Muchos en Lituania temen que Rusia pueda atacar a los países bálticos después de Ucrania. La OTAN responde a estos temores y quiere fortalecer su llamado "flanco oriental". Para ello, entre otras cosas, se desplegará en Lituania una brigada de la Bundeswehr alemana.
Como resultado, toda la política de defensa de Lituania quedó bajo escrutinio. El servicio militar obligatorio universal tiene ahora como objetivo mostrar a los aliados de la OTAN que el liderazgo político del país se toma en serio la protección del territorio y de la soberanía.
Lituania gasta regularmente más del dos por ciento de su producto interno bruto en defensa, cumpliendo así con las metas de la OTAN. Sin embargo, el país, con sus 18.000 soldados profesionales actuales, es considerado un peso ligero en el terreno militar.
Nueva realidad político-militar
"Hace apenas unos años, algunos de nuestros políticos decían que la OTAN siempre nos protegería. Se suponía que Lituania, como país pequeño, podría prescindir de grandes inversiones en defensa", recuerda Vaidotas Malinionis, jefe de una asociación de oficiales jubilados lituanos.
"Hoy todo es diferente, la decisión sobre el servicio militar obligatorio lo demuestra”, subraya. "Serán necesarias más inversiones en infraestructura, incluida la construcción de cuarteles. Pero eso es más una cuestión de tiempo que de voluntad política", afirma el coronel fuera de servicio.
Lituania sigue dependiendo de la ayuda de la OTAN. La brigada de combate de la Bundeswehr alemana será estacionada permanentemente en el país en nombre de la alianza. Junto con unidades de otros aliados que solo se encuentran allí temporalmente, participarán periódicamente en maniobras.
"Cuando llegó el aviso de reclutamiento, no quería alistarme en el Ejército. Pero hoy me doy cuenta de que las tropas me han cambiado. Soy más responsable y organizado, me comunico mejor con la gente", dice Maxim. Su madre, Irina, de 47 años, coincide: "Puede parecer extraño pero, desde que sirvió en el Ejército, mi hijo es más amigable y aprecia más a su familia". Para ella, el servicio militar obligatorio "es bueno para el país y los muchachos maduran".
Problemas de aptitud
Valentinas, de 43 años y padre de un hijo que pronto será reclutado, lo ve distinto. "Estuve bajo contrato con las tropas de telecomunicaciones durante cuatro años. Si estalla una guerra, nueve meses de entrenamiento, todos los disparos y lanzamientos de granadas, no serán suficientes para enfrentar a un enemigo real. Los soldados profesionales tendrán que hacerse cargo de los combates, no los muchachos", afirma.
Valentinas cree que sería mejor para los jóvenes realizar cursos en las organizaciones de voluntarios que reclutarían personal para la defensa civil, las patrullas y el apoyo policial en caso de que se establezca la ley marcial en Lituania. Considera que el Ejército no está preparado para los problemas de hoy: "Muchos niños simplemente se sientan frente al ordenador y viven en un mundo virtual. También hay muchos poco desarrollados físicamente y a veces enfermos. Al fin y al cabo, muchos hoy no tienen claro qué significan los deberes".
El excoronel Malinionis, de la asociación de oficiales, también admite que existen problemas de aptitud de los reclutas. Pero no cree que la situación sea crítica: "Hoy se descarta hasta el 50 por ciento", reconoce. Pero considera que hay criterios obsoletos que deberían cambiarse, y que "los aficionados a los videojuegos, en vez de correr por el bosque con una escopeta, podrían ocuparse de comunicaciones, guerra cibernética y drones". Si se hiciera así, afirma, se reduciría significativamente la tasa de no aptos para el moderno Ejército de reclutas en Lituania.
(rml/ers)