Wagner vuelve a Barcelona
31 de agosto de 2012¿Vuelve Wagner a Barcelona? Pero, ¿es que se fue alguna vez? La presencia del compositor alemán ha sido una constante en la Ciudad Condal desde el último cuarto del siglo XIX. El modernismo de la época vio en la nueva forma de hacer música del operista germano una luz hacia la que guiar los pasos de la cultura de Cataluña. Se creó entonces una tradición wagneriana que hoy perdura.
En aquella época se fundó la Asociación Wagneriana, se tradujeron al catalán los libretos de sus óperas, se representó Lohengrin en Barcelona y el culto wagnerista se convirtió en seña de identidad de la afición musical barcelonesa. No olvidemos que Parsifal se representó de forma legal por primera vez fuera de Bayreuth en el Teatro del Liceo de Barcelona, con el tenor Francisco Viñas en el papel protagonista.
De Parsifal al Festival de Bayreuth en el Liceo
Había gran expectación por disfrutar de la ópera y las crónicas hablan de las colas ante la taquilla formadas pocas horas antes de que expiraran los derechos de representación pública. En la medianoche del 1 de enero de 1914 dio por fin comienzo Parsifal en el Teatro de Liceo, función que duró hasta las cinco de la madrugada aproximadamente.
Tras Parsifal, fue el mismísimo Festival de Bayreuth el que desembarcó en Barcelona. En 1951 tuvo lugar una primera toma de contacto. Los nietos de Wagner deseaban relanzar un Festival con una imagen muy deteriorada. El Ayuntamiento de la ciudad programó entonces la exposición “Wagner en el mundo” y celebró diversos eventos conmemorativos que hicieron las delicias de la afición wagneriana.
Cuatro años más tarde, el propio Festival de Bayreuth conmocionó la ciudad con su llegada. Se celebraron numerosas actividades relacionadas con el compositor y se representaron Parsifal, Tristán e Isolda y La Valquiria con puesta en escena de Wieland Wagner. Entre los intérpretes, Eugen Jochum a la batuta y varios míticos cantantes wagnerianos de los años 50.
La mirada puesta en el bicentenario Wagner
Aunque nada pueda equipararse al aura mítica del Festspielhaus sobre la Colina Verde, a su acústica, a su austera sala y, por qué no, a sus incómodos asientos, la expectación creada hará que los acordes de El holandés errante (1 y 4 de septiembre), Lohengrin (2 y 5 de septiembre) y Tristán e Isolda resuenen de manera especial en el Liceo.
Será en versiones de concierto. A la batuta, el berlinés Sebastian Weigle, que dirigió en Bayreuth y fue director del Liceo de Barcelona entre 2004 y 2008. En Tristán e Isolda será el vienés Peter Schneider quien se coloque frente a la Orquesta del Festival de Bayreuth. La visita del Festival de Bayreuth al Liceo convierte a Barcelona en el punto de partida de los festejos del bicentenario Wagner.
Autora: María Santacecilia
Editor: Enrique López