Washington y Moscú abren nueva era
6 de julio de 2009El presidente de Estados Unidos, Barack Obama y su homólogo ruso, Dmitri Medvédev, acordaron el lunes que continuarán sus conversaciones para responder de manera conjunta a la proliferación de armas nucleares, una cuestión delicada para ambos países. Ambos mandatarios realizaron una declaración conjunta en la que urgen a países con potencial atómico a evitar adoptar medidas que puedan conducir a una proliferación armamentista que ponga en peligro la estabilidad global y regional.
Ambos países, que poseen conjuntamente un 95% del armamento nuclear en el mundo acordaron que firmarán un acuerdo para reducir sus arsenales de 2.200 hasta un nivel entre 1.500 a 1.675 cabezas nucleares. Obama y Medvédev dijeron que continuarán las conversaciones sobre el tema del desarme y anunciaron que expertos de ambos países analizarán los desafíos que suponen los misiles balísticos en el siglo XXI y prepararán recomendaciones dando prioridad a medidas políticas y diplomáticas
Sistema de defensa antimisiles
Obama reconoció las sensibilidades del Kremlin frente a la propuesta realizada por su predecesor, George W. Bush, de instalar un sistema de defensa antimisiles en Polonia y la República Checa, que Rusia considera como una amenaza para su seguridad. Éste sigue siendo el principal obstáculo para una normalización de las relaciones después de que llegaran a un punto gélido, “la tensión entre Moscú y Washington volvió a los niveles de la Guerra Fría”, escribe en su blog Dmitri Medvédev. Oficiales rusos enfatizaron que no habrá un acuerdo clave entre ambos gobiernos mientras Washington no haga concesiones respecto a los planes de instalar el sistema antimisiles en Europa.
Rusia permitirá que aterricen sobre su territorio unos 4.500 aviones al año con tropas y armamento para la guerra en Afganistán, un gesto con el que el Kremlin quiere demostrar su disponibilidad a cooperar con Washington. Otros acuerdos comprenden cooperación militar, la creación de una comisión para intensificar la cooperación entre ambos gobiernos, así como nuevas inversiones.
“Buen comienzo”
Los acuerdos alcanzados durante el primer día de la cumbre bilateral que se prolongará durante dos días, fueron saludados por expertos. El ex- embajador y presidente del Centro de Estudios Políticos de Rusia, Roland Timerbayev, calificó el anuncio sobre la reducción de misiles como un buen comienzo. “Da un impulso a las negociaciones para continuar en algo que ambos presidentes quieren y necesitan, sin embargo una mejora sustancial en las relaciones será un largo proceso que no puede alcanzarse en un día. También el acuerdo en torno a Afganistán es sumamente importante”, dijo el experto a la agencia Reuters.
“Estamos seguros de que seguiremos avanzando sobre las excelentes discusiones que sostuvimos en Londres”, dijo Obama a su homólogo ruso al iniciar las conversaciones, refiriéndose el encuentro bilateral que tuvieron en abril. Con su famosa consigna “Yes we can”, el presidente estadounidense, Barack Obama apuesta por abrir un nuevo capítulo en las relaciones ruso-estadounidenses, que se enfriaron considerablemente durante la era Bush.
El presidente estadounidense pasará espléndidas veladas en Moscú en donde pernoctará en una suite del hotel Ritz Carlton de 237 metros cuadrados que cuenta con una vista al Kremlin y un costo de 12.000 euros por noche.
Autora: EU/ Reuters, AFP
Editor: Pablo Kummetz