“Largas colas para votar”

Deutsche Welle: Señora Weiler, ¿cuáles son sus primeras impresiones de la jornada electoral? ¿Transcurre todo en orden?

Barbara Weiler: Sí, en los locales de votación que yo he visitado, todo se desarrolla ordenadamente. Estuve en la apertura en las cercanías de Kiev y luego viajamos a Bila Zerkwa, unos 80 kilómetros al sur. Allí visitamos algunos locales electorales y todo estaba absolutamente tranquilo. Bila Zerkwa es una ciudad grande y la participación –si bien no conozco aún los porcentajes– era tan buena que la gente tenía que hacer cola. En todas partes vi filas para votar.

¿Cuál es exactamente su tarea como observadora electoral?

Cuando llego a un local electoral, hablo con el encargado o la encargada. Pido que me muestren las listas, pregunto si se han producido irregularidades, miro las urnas, las cabinas y los alrededores, para ver si hay propaganda no autorizada. Aquí es común que afuera cuelguen fotos de los candidatos, todas del mismo tamaño; pero no propaganda electoral. Luego converso con la gente, con ayuda de mi intérprete, y le pido su opinión sobre el desarrollo de la jornada. Dado que también tenemos observadores ucranianos, está garantizado un doble chequeo.

¿Qué organismo la invitó a actuar como observadora electoral?

El Parlamento Europeo envió una pequeña delegación de siete personas. En las elecciones pasadas éramos casi el doble. Trabajamos estrechamente con la Organización de Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), que tiene aquí más de mil observadores electorales activos. Además están el Consejo de Europa y la OTAN.

¿Hay también observadores electorales en el este de Ucrania, en Donetsk y Lugansk?

Sí, pero se trata de los observadores de la OSCE que ya llevan allí dos meses, y hay también algunos en la región del Donbás. A nosotros, los políticos o expolíticos, se nos indicó que por ningún motivo fuéramos al este del país. También Odesa quedó fuera, debido a los tiroteos que allí hubo. Aquí hay muchos parlamentarios de diversos países: el Bundestag alemán está representado, Lituania está presente y también Canadá tiene una delegación...

Usted mencionó que hay muchos observadores occidentales, pero, ¿qué hay de Rusia? ¿No ha enviado Rusia a sus observadores?

Hace un par de días escuchamos en la radio que Rusia iba a enviar observadores electorales. Sin embargo, la acreditación oficial se llevó a cabo a través de la OSCE. Todos se manifestaron de acuerdo con ello. Pero allí no se ha acreditado a ningún veedor ruso.

Al parecer, los separatistas de Ucrania Oriental hacen todo lo posible por sabotear estas elecciones. ¿Cree usted que bajo estas circunstancias sea posible celebrar comicios libres?

Todos estaban esperando estas elecciones: la comunidad internacional y también la ciudadanía. Cuando veo con cuánto interés va a votar la gente, no me cabe duda al respecto. Es lamentable que Crimea no vote también. Hay ciudadanos que podrían inscribirse en otro lugar e ir a votar; pero, en la práctica, eso es muy difícil. También los habitantes de las dos regiones de Ucrania Oriental deberían haber tenido la posibilidad de votar fuera de su distrito, si dentro de él había peligro. En la práctica veremos luego qué ocurrió. Pero no puedo imaginar que, ante la amenaza de los separatistas y terroristas, la gente haya ido a votar en gran número. Es probable que esas regiones queden entonces excluidas. Pero la actual Constitución ucraniana permite que, pese a ello, el resultado electoral sea reconocido, dependiendo del porcentaje que falte.

¿Cree usted que estas elecciones puedan contribuir a detener el desmembramiento de Ucrania?

Es lo que aquí se espera. Se espera que ahora haya un nuevo comienzo. Ojalá que en este nuevo comienzo, a partir de la semana entrante, no se cometan los mismos errores que también se cometieron de parte nuestra. No habrá otra salida más que reunir a todos en la mesa de negociaciones para debatir cómo seguir adelante.

*Barbara Weiler es europarlamentaria del Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD).