Blair entrega liderazgo del laborismo británico a Gordon Brown

Mientras Tony Blair preparaba el texto de su renuncia que entregará a la reina Elizabeth II, Brown prometió cambios en la política británica después de recibir el apoyo de los delegados del congreso laborista en Manchester. El hasta ahora canciller del Tesoro se hará cargo del laborismo tras 13 años del liderazgo de Blair, de quien recibirá las llaves del número 10 de Downing Street este miércoles 27 de junio.

“Debemos ser el partido del cambio”, dijo Brown, que anunció nuevas prioridades y desafíos. Blair aseguró que Brown “será un magnífico primer ministro para este país”, debido a su “fortaleza” y la “fidelidad a sus principios”.

Adiós al carismático y controvertido “Tony”

Su designación marca el final de una etapa política que comenzó en 1994, cuando Brown se hizo a un lado en la competencia por el liderazgo para favorecer al más popular y carismático Blair, en un pacto por el cual algún día él heredaría el puesto.

Brown, con su esposa Sarah a su lado, le agradeció a Blair por llevar “la carga del liderazgo del país” durante los últimos años, lo cual ha sido una “responsabilidad imponente”, según consideró. Asimismo, Brown prometió “justificar cada día la confianza” que el partido depositó en él.

Las mentiras de Blair y cía

La confianza en los líderes políticos se ha convertido en un tema delicado para los laboristas desde que Blair condujo al país a la guerra de Irak y el posterior fracaso en encontrar las supuestas armas de destrucción masiva en poder del extinto dictador Saddam Hussein.

Brown manifestó que Gran Bretaña cumplirá sus “obligaciones” en Irak, aunque también insistió en que la participación militar debe ser complementada por ayuda económica y la búsqueda de la reconciliación.

Fuerte repudio a la guerra en Irak

Durante la ceremonia de cambio de mando, frente al Bridgewater Hall en Manchester, donde se celebraba la conferencia, unos 7.000 manifestantes se reunieron para repudiar la guerra en Irak, pidiendo que sean retiradas las tropas británicas. La protesta fue organizada por la “Coalición Detengan la Guerra”.

Por otra parte, la vicepresidencia laborista es ahora ocupada por la ministra de Justicia, la veterana política Harriet Harman, que releva al viceprimer ministro John Prescott. Harman, dijo que había “mucha indignación y división” sobre Irak en el partido, y sugirió que el Parlamento había sido eludido en decisiones vitales. Esa ira debe ser reconocida, advirtió Harman, mientras se necesita dar “apoyo total” a las fuerzas armadas británicas que se encuentran respaldando la frágil democracia en Irak.

Elecciones populares en 2009 ó 2010

En Gran Bretaña es tradición que el jefe del partido de Gobierno, asuma también como primer ministro. Nuevas elecciones nacionales no son necesarias, si se cambia al mandatario una vez haya cumplido más de la mitad de su período.

Tras la designación al poder por parte de su partido, el laborista Brown tendrá que someterse al voto popular en 2009 ó 2010.