Internet para ricos
25 de febrero de 2010Dos de cada tres personas en el mundo tienen acceso a la telefonía móvil… al menos en promedio. Y es que los países ricos tienen un exceso de oferta; en éstos hay más conexiones para teléfonos celulares que pobladores. Mientras tanto, en los países en desarrollo, poco más de la mitad de sus habitantes puede hacer llamadas desde un teléfono portátil; 57 por ciento de su población, según estadísticas correspondientes al año 2009.
Desde esta perspectiva, la brecha entre unos países y otros es grande, pero la disponibilidad de Internet y telefonía móvil en las regiones no industrializadas está creciendo de manera vertiginosa: en los últimos cinco años, la cantidad de conexiones para teléfonos celulares se ha duplicado.
Brechas digitales
El abismo entre los países ricos y los pobres es aún más grande cuando se analiza el acceso de sus respectivos habitantes al servicio de Internet. Los expertos en la materia sostienen que una de cada cuatro personas en el mundo navega en el ciberespacio, pero un examen más detallado de este dato estadístico revela que el 64 por ciento de la población de los países industrializados tiene acceso a Internet mientras que sólo el 18 por ciento disfruta de este privilegio en los países en vías de desarrollo.
Ni qué hablar de las conexiones de Internet rápidas. En los países industrializados, por cada cien habitantes hay 23 conexiones de banda ancha; en los países en desarrollo –sin incluir a China–, sólo hay dos conexiones de este tipo por cada cien personas. En números absolutos, la República Popular China tiene más conexiones de banda ancha que Estados Unidos.
Nuevos índices de desarrollo
Para estimar con mayor precisión la importancia de las tecnologías de información y comunicación modernas en el mundo, los especialistas en estadísticas de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), un organismo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), han establecido unos criterios para medir el índice de desarrollo de los países. Entre esos criterios figura no solamente el acceso de los pueblos a estas tecnologías, sino también la intensidad y calidad del uso que se hace de ellos, así como la capacidad de los usuarios para servirse efectivamente de estas herramientas de comunicación.
De este índice de desarrollo se ha derivado un ranking con 159 países. Suecia lidera la lista, seguida por Luxemburgo, Corea del Sur, Dinamarca, los Países Bajos, Islandia, Suiza, Japón, Noruega y Gran Bretaña. Estados Unidos ocupa el puesto 19; España, el 25 y Portugal, el peldaño 32. Los países latinoamericanos y caribeños con los índices de desarrollo más altos, según el ranking de UIT son: San Vicente y las Granadinas (puesto 46), Argentina (49), Uruguay (50), Chile (54), Trinidad y Tobago (59), Brasil (60), Venezuela (61), Panamá (62), Colombia (63), Jamaica (67), Costa Rica (70), Perú (75) y México (77).
Alemania no está en el “Top 10”
Aquellos países ubicados en la segunda mitad del ranking son: Ecuador (puesto 87), República Dominicana (89), Paraguay (94), Cuba (98), Bolivia (101), El Salvador (103), Guatemala (104), Honduras (106) y Nicaragua (112). Alemania, por su parte, ocupa el puesto 13. “Sin embargo, para ser justos, hay que decir que los índices de los primeros quince países de la lista son muy similares”, explica Susan Telscher, directora del departamento de Estadísticas de la UIT. 75 por ciento de los hogares alemanes tienen acceso a Internet, dice Telscher, pero en Suecia la cifra asciende al 80 por ciento.
El hecho de que los últimos veinte peldaños de la lista de UIT estén ocupados por países del continente africano –exceptuando a Haití y a Nepal– se debe al alto costo de las tecnologías para la comunicación en esa región. Mientras la mayoría de los europeos invierte poco más del 1 por ciento de un sueldo promedio para pagar por una conexión de banda ancha, en muchos países de África los usuarios deben ahorrar cinco salarios mensuales para poder disfrutar de una conexión de Internet rápida por un mes.
El caso africano
Lo cual no significa que no tengan lugar cambios rápidos o contrastes entre la situación de un país africano y la de sus vecinos: en 2008, una conexión de Internet rápida en Burkina Faso costaba mensualmente el equivalente a cuatro sueldos anuales promedio. Un año después, los pecios bajaron notablemente: un mes de conexión rápida a Internet cuesta solamente el equivalente a dos sueldos mensuales promedio.
Autor: Andreas Becker / Evan Romero-Castillo
Editor: Pablo Kummetz