Menor demanda de crudo
11 de junio de 2008
La demanda mundial de petróleo crecerá a un ritmo más lento en seis años durante el 2008 luego de que una reciente suspensión de subsidios en varios países asiáticos redujo el consumo energético, se asevera en un informe de la Agencia Internacional de Energía (AIE). Debido al recorte de subsidios, la demanda global crecerá sólo un 0,9 % en comparación al año anterior.
La agencia que asesora a 27 países industrializados dijo en su reporte mensual del mercado petrolero que el consumo global de petróleo crecerá en unos 800.000 barriles por día (bpd) este año, 230.000 bpd menos que lo previamente pronosticado. Según informan agencias, el jefe de la división mercados e industria petrolera de la AIE, Lawrence Eagles, aseveró que el crecimiento de la demanda será este año el menor desde el 2002.
Contra la pared
El alza de los precios del petróleo ha obligado a varias economías en desarrollo en Asia a recortar subsidios en las últimas semanas. India, Indonesia, Malasia, Sri Lanka y Taiwán revisaron sus precios administrados de combustible, lo que según la AIE domesticaría ligeramente el crecimiento de la demanda de crudo en la región.
"El período de calma en el crecimiento de la demanda de crudo, sin embargo, podría ser sólo temporaria pues el fuerte crecimiento económico sigue siendo la fuerza clave", señaló la AIE, añadiendo que las perspectivas de un recorte sustancial a los subsidios en China y Oriente Medio eran remotas. La AIE también recortó su pronóstico de crecimiento en el suministro de crudo no proveniente de la OPEP a 460.000 bpd, contra los 680.000 bpd en su reporte previo. Asimismo, elevó la demanda esperada de crudo a la OPEP para este año en 300.000 bpd, a 31,6 millones de bpd.
El dramático aumento de los precios de energía y el cambio climático exigen, según la AIE, medidas radicales. Despedirse de las energías fósiles es el camino que vislumbra la agencia, a largo plazo. “Requerimos una descarbonización de la industria energética”, dice el informe. Para ello propone multiplicar por 50 el volumen de la obtención de energía eólica y por 200, la solar.