Merkel advierte del “lado oscuro de la globalización"

En la distinguida localidad suiza de deportes de invierno Davos, la canciller alemana llamó insistentemente a cooperar y romper con estructuras osificadas. Merkel apeló también a la flexibilidad, a contrapelo de todas las experiencias realizadas hasta ahora, en en particular la negativa de EE UU a firmar el Protocolo de Kyoto y de algunos países de la UE a abrir el mercado agrícola europeo.

“Un fracaso será responsabilidad de todos”, advirtió la canciller. El Foro Económico Mundial (FEM) consideró hoy la lucha contra el cambio climático y los avances en las negociaciones de la Ronda del Desarrollo de Doha como asuntos vitales para la economía global, y en especial para los países en desarrollo.

En su calidad de actual presidenta del Consejo de la UE, Merkel llamó también a Europa a integrarse más. “Con las reglas actuales, Europa no puede actuar como debería. La UE debería poner todo su peso junto en la balanza”, advirtió.

Por su parte, la presidenta y ministra de Asuntos Exteriores de Suiza, anfitriona de la conferencia, Micheline Calmy-Rey, machacó en el mismo punto, apelando a la conjunción de fuerzas para lograr éxitos en resolver los problemas del mundo y subrayó que “esos éxitos se logran abriéndose a los otros”.

Prioridad del cambio climático

Merkel y Calmy-Rey hablaron ante un auditorio de más de 2.400 personalidades del mundo político, económico y académico, entre ellos mil representantes de empresas, que hasta el 28 de enero debatirán en Davos las maneras de resolver los problemas internacionales más candentes.

Los organizadores del Foro han querido incluir a las mayores empresas mundiales en la búsqueda de soluciones a los problemas del cambio climático y para ello se desarrollarán 17 debates, en los que se buscarán soluciones en cooperación con los gobiernos y con organizaciones no gubernamentales.

El responsable de las iniciativas ambientales del Foro, Dominic Waughray, señaló que los miembros de la institución “han pedido situar el cambio climático y otros asuntos como la seguridad medioambiental en el centro de los debates”.

Si a todas esas declaraciones se agrega el reciente mensaje a la nación del presidente de EE UU, George W. Bush, en el que llamó a ahorrar gasolina y buscar fuentes alternativas de energía, pareciera que efectivamente está comenzando un cambio en algunas mentes.

Israel, Palestina e Irak

Los problemas de Oriente Medio, en especial el conflicto entre israelíes y palestinos y la seguridad de Irak, considerados de importancia crucial por los asistentes, serán otros de los asuntos que ocupe en los próximos días la agenda del Foro.

Para abordar esos asuntos estarán presentes el rey Abdalá de Jordania, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás (Abú Mazen), el viceprimer ministro de Israel, Simon Peres, y la ministra de Relaciones Exteriores israelí, Tzipi Livni.

Las medidas de seguridad en torno a Davos han sido extremadas por las autoridades helvéticas, que han desplegado más de 5.500 soldados, mientras que su espacio aéreo es protegido por sus fuerzas aéreas.

Los enunciados de Davos a veces ya están olvidados cinco días después de terminado el encuentro. Por ejemplo en 2005: entonces se anunció una iniciativa de desendeudamiento para los países pobres. Pero muchas promesas quedaron sólo en eso.

No obstante, Davos es un escenario para una efectiva comunicación. “Cuatro días en Davos es como cuatro meses de viaje” han dicho un alto ejecutivo. En reuniones similares en grandes ciudades, después de las reuniones oficiales, todo el mundo se va a sus oficinas o al centro. En Davos, es diferente.