Más de 150 muertos y 640 heridos en acción de rescate en Beslán
3 de septiembre de 2004
En los tiroteos con las fuerzas de seguridad murieron hoy veinte terroristas, la mitad de los cuales son de países árabes, aseguró hoy Valeri Andreyev, jefe del Servicio Federal de Seguridad ruso en la república de Osetia del Norte, a la agencia Interfax.
El saldo de víctimas mortales en la toma de rehenes podría superar las 150, según comunicó hoy Aslambek Aslajanov, asesor del presidente ruso, Vladimir Putin.
Los heridos, según la agencia rusa Itar-Tass, ascienden al menos a 646, de ellos 227 son niños. La mayoría de los hospitalizados presentan heridas de bala y quemaduras.
Desde círculos policiales se dijo que el ataque no estaba planeado. "Esta variante no era una opción en nuestros planes, ya que en la escuela había tantos niños", citó la agencia Interfax a un miembro del gabinete de crisis.
Algunos terroristas huyeron
El asalto comenzó a las 13.05 horas local. Miembros de protección civil llegaron al patio de la escuela tras un acuerdo realizado por teléfono anteriormente con los secuestradores para retirar los cadáveres que había allí desde el miércoles. Según la versión oficial, entonces se produjo una explosión dentro del edificio, donde los terroristas habían introducido explosivos. Cinco de ellos murieron.
Un grupo de niños salió entonces a través de un agujero que se hizo en la pared y escapó a través del patio. Los terroristas dispararon entonces contra ellos y al menos cinco murieron en la lluvia de balas.
En ese momento, el gabinete de crisis ordenó el asalto. Tropas especiales entraron en el edificio, mientras que un grupo de unos diez terroristas aprovechó el caos para romper el cordón policial. Fueron localizados después en la ciudad y comenzaron entonces fuertes combates con la policía y el Ejército. Según testigos, tanques dispararon contra un edificio en el que se habían atrincherado terroristas.
Muchos heridos
Equipos de rescate levantaron espontáneamente lugares de primeros auxilios en el parque cercano. Los rehenes que iban saliendo iban recibiendo allí las primeras atenciones médicas antes de ser trasladados a hospitales. El Ejército y Protección Civil levantaron hospitales de campaña en las afueras de la ciudad. Muchos de los heridos fueron llevados a los hospitales en ambulancias o vehículos privados. Testigos describieron la situación como “absolutamente caótica”.
En el centro escolar había unas 1.200 personas y no 354 como se había informado con anterioridad, según señaló Aslajanov, que agregó que un 70 por ciento de ellos eran niños. Los terroristas, armados con lanzagranadas y cinturones explosivos, tomaron la escuela el miércoles cuando en ella había padres, profesores y alumnos congregados en el patio para celebrar el comienzo del curso.