Opel: ¿divorcio de GM?
26 de febrero de 2009Los trabajadores y técnicos de Opel del escorado grupo estadounidense General Motors (GM) exigen una “la separación de GM en forma de empresa autónoma Opel/Vauxhall y una solución sostenible propia para Saab”. Saab, que también pertenece a GM, se acaba de declarar insolvente.
En un acto central, llevado a cabo en medio de una situación general cada vez más caldeada en la sede central de Opel en Europa, hablaron el vicecanciller federal alemán y ministro de RR. EE., el socialdemócrata Frank-Walter Steinmeier y el presidente del Sindicato Metalúrgico, Bertold Huber.
"Para nosotros sólo hay una perspectiva de futuro y esa solución es un modelo europeo", dijo Klaus Franz, presidente del Comité de Empresa de Opel. Franz explicó que la propuesta empresarial que el Consejo de vigilancia del grupo presentará al gobierno alemán consiste en una separación del fabricante sueco Saab, de modo que "lo único que quede en Europa de GM sea Opel y la inglesa Vauxhall".
Opel negocia salvataje desde hace meses
El representante del grupo subrayó sin embargo que, para poder llevar a cabo con éxito el desmembramiento, Opel depende de apoyos estatales, al menos a corto plazo. "Necesitamos las ayudas estatales para asegurar la liquidez y el capital propio", subrayó.
Franz agregó que debido a la crisis que atraviesa el sector automotor, el grupo no puede esperar que inversionistas se interesen por aportar capital. "Si no, no estaríamos hablando de ayudas estatales", dijo recurriendo a una verdad de Perogrullo.
Opel negocia con el gobierno alemán desde hace meses la posible concesión de avales estatales por un monto de hasta 1.800 millones de euros (2.270 millones de dólares). La prensa alemana escribe, sin embargo, que la compañía necesita una asistencia estatal mucho mayor que la inicialmente prevista.
Según el semanario "Der Spiegel", el gobierno cifra en 3.300 millones de euros (4.100 millones de dólares) la falta de liquidez de la subsidiaria de General Motors, en lugar de los 1.800 millones de euros solicitados.
Gobierno exige proyecto viable
Para decidir si le concede esas garantías, Berlín espera que Opel le presente un proyecto viable, que le abra a la empresa verdaderas perspectivas de futuro. Lo que no habrá es “un cheque en blanco" para Opel, dijo el portavoz gubernamental Thomas Steg.
Uno de los temores del gobierno alemán es que dineros destinados para Opel terminen en las arcas de GM, que debido a profundos problemas estructurales que arrastra desde hace años se halla en un callejón de difícil salida.
Por ello, según el diario económico Handelsblatt, la gerencia de Opel baraja la posibilidad de transformar a la empresa, que hasta el momento es una sociedad de responsabilidad limitada totalmente dependiente de GM, en una sociedad anónima de acuerdo con el derecho comercial europeo. Ello facilitaría mucho una eventual ayuda del Estado alemán. Actualmente, Opel ni siquiera dispone de una cuenta bancaria propia.
Según adelantó hoy Berthold Huber, presidente de IG-Metall, Opel presentará su concepto este viernes, aprovechando la celebración de una reunión del consejo de vigilancia.
Opel emplea a cerca de 26.000 personas en sus cuatro plantas alemanas. En la central, ubicada en Rüsselsheim, en el Estado federado de Hesse, tiene una plantilla de 16.000 trabajadores y en Bochum, Estado federado de Renania del Norte- Westfalia, 5.300. Unas 1.800 personas trabajan en la fábrica de Eisenach, en Turingia, y cerca de 2.300 lo hacen en Kaiserslautern, en Renania-Palatinado.