Preocupación por Juan Pablo II
25 de febrero de 2005
El mundo mira con preocupación hacia Roma, en donde el papa Juan Pablo II fue sometido anoche a una traqueotomía, después que una nueva crisis respiratoria aguda lo obligara a hospitalizarse por segunda vez en lo que va de mes.
Tanto portavoces del Vaticano como fuentes médicas aseguran que la intervención ha terminado satisfactoriamente, y que el Sumo Pontífice no necesita respiración asistida, lo cual es buen signo para Juan Pablo II, cuyo estado de salud no es nada bueno. El parkinson y la artritis lo aquejan, y sus 85 años hacen una intervención altamente delicada. Partiendo del supuesto de que el periodo postoperatorio sea un éxito, hay que contar con que Juan Pablo II, de legendaria locuacidad, no podrá emitir sonidos por largo tiempo.
El deterioro de la salud del Papa ha revivido los temores en la Iglesia Católica sobre el posible fin de uno de los papados más significativos de la historia, por diversos motivos. El haber ascendido al trono pontificio en un año en que hubo tres Papas subrayó desde el comienzo la originalidad de este pontífice.
Querido y controversial
El políglota Karol Woytjla ha ocupado la silla de Pedro por el largo período de 26 años, el segundo pontificado más longevo de la historia. También ha sido el primer no italiano en, según la doctrina católica, "representar a Dios sobre la Tierra". Y, como pocos antes de él, se ha manejado en el terreno internacional como un estadista.
Como autoridad moral se ha hecho escuchar mundialmente, defendiendo los derechos humanos y la justicia, también oponiéndose a una globalización en la cual impera la ley del más fuerte. Tampoco tuvo reparos, por ejemplo, en exhortar a Estados Unidos y sus aliados a buscar alternativas a la solución bélica cuando la guerra contra Irak.
Por otro lado, sus posturas morales en cuanto a sexualidad, aborto y métodos anticonceptivos lo convirtieron en una autoridad, si bien querida -sobre todo en el Tercer Mundo- ,bastante polémica.
En la mira del mundo
Mientras llegaban mensajes de apoyo de los líderes mundiales desde Australia hasta Estados Unidos, distintos observadores elogiaban a un Papa que salió de Wadowice, un pueblo pobre de Polonia, y en 26 años y más de 100 viajes internacionales ha ejercido un rol político, en el cual tuvo no poco que ver el haber vivido el régimen comunista de Polonia.