Spa bancario

"El banco del futuro" es lo que representa, según el Deutsche Bank, su filial de la Friedrichstraße, en pleno centro de Berlín. Q110 es el nombre de esa sucursal que, por cierto, tiene poco que ver con las dependencias bancarias a las que estamos acostumbrados. No es que se destaque por su lujo o por su tecnología. Tampoco apela al abolengo para atraer clientes. El concepto de este banco es diferente.

Diseñado para cautivar

La idea básica es que la visita al banco deje de ser un simple trámite aburrido para convertirse en una actividad asociada con el bienestar y la diversión. Relajarse, comprar o tomarse un café son algunos de los panoramas que ofrece la filial Q110, en un intento por cambiar el perfil de la actividad bancaria. El frío mundo del dinero se presenta allí con discreción, los cajeros automáticos y los terminales para realizar alguna operación están distribuidos por el amplio local sin perturbar el ambiente, que más parece el de un mall o un spa. No es casual que el aspecto de la sucursal en cuestión haya sido concebido por dos expertos en diseño de locales comerciales, que ya han elaborado conceptos para tiendas de Esprit y otras importantes marcas.

A este "banco del futuro" no se va sólo a sacar o a depositar dinero, sino también a gastarlo. Siguiendo la tendencia del momento, la sucursal de la Friedrichstraße apuesta por atraer clientes particulares ofreciendo una serie de productos relacionados con la salud y el bienestar. Por ejemplo, ahí uno puede encontrar una tienda de productos orgánicos, una cafetería con jugos de fruta naturales y pan integral, una sección de perfumería y hasta la posibilidad de darse un masaje contra el estrés o hacerse una exfoliación de la piel de las manos.

Cuenta sana in corpore sano

La oferta incluye también veladas especiales y actividades como un viaje de degustación de vinos y otros panoramas atractivos para el público. Además, cada mes hay acentos temáticos diferentes. En mayo, el tema es "vivir con más conciencia" y, en ese marco, junto con empresas asociadas, se abordan aspectos como la alimentación sana o la forma de embellecer la vida cotidiana.

Lógicamente, lo que al banco le interesa es ganar clientela e incrementar sus propios negocios. Para ello, Q110 cuenta también con agradables salas de reunión, donde tratar los asuntos monetarios en una atmósfera grata. La meta es ganar un 50% de clientes nuevos más que el resto de las filiales tradicionales. Por ahora, en la página web del Deutsche Bank se consigna con satisfacción que más de 100 mil personas han visitado ya la sucursal, abierta en septiembre del año pasado. ¿Cuántas de ellas habrán abierto nuevas cuentas o recurrido a los instrumentos financieros que ofrece el banco?