Para Estonia, el euro es ya una realidad contante y sonante
1 de enero de 2011La alegría es grande en la pequeña Estonia: el país número 17 que forma parte del euro, la moneda común de la Unión Europea. El banco central comunicó hoy en Tallín que el cambio de divisa transcurrió sin dificultades.
Estonia, que ingresa en medio de las turbulencias por la crisis de deuda europea, es la tercera nación de los nuevos miembros de Europa del este y central que se suma a la eurozona. Antes lo hicieron Eslovenia y Eslovaquia, que cumplieron con los requisitos económicos.
Desde la pasada medianoche, esta nación báltica con 1,3 millones de habitantes que se adhirió a la Unión Europea en 2004, se convirtió en la primera ex república soviética que ingresa en la eurozona.
En Tallín la nueva divisa se recibió con un espectáculo de fuegos artificiales. La aprobación definitiva para la introducción del euro tuvo lugar durante la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno que se celebró en Bruselas en junio pasado. En la actualidad 330 millones de personas viven en la eurozona.
Poco después de la medianoche, el primer ministro estonio Andrus Ansip sacó por primera vez euros de un cajero automático. Rodeado de periodistas, sacó 20 euros (unos 26 dólares). "Se trata de una pequeña suma para la eurozona, pero de un gran paso para Estonia", aseguró Ansip, para quien este cambio confirma el estatus de Estonia como nación europea.
Estonia cumple, a diferencia de las vecinas Letonia y Lituania con las condiciones de ingreso al ofrecer un presupuesto equilibrado y una deuda pública escasa.
Llamado presidencial
En su discurso de Año Nuevo, el presidente Toomas Hendrik Ilves elogió a sus conciudadanos y les instó a seguir cumpliendo con los requisitos a pesar de la crisis de la deuda en Europa.
En sus discursos de Año Nuevo, tanto la canciller alemana, Angela Merkel, como el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, destacaron la importancia del euro.
Merkel subrayó que "el euro es mucho más que una moneda" e insistió en que es la base del bienestar en el país. Sarkozy, por su parte, fue tajante "El fin del euro sería el fin de Europa", concluyó.
El comisario de Asuntos Económicos de la Unión Europea, Olli Rehn, ya había señalado el viernes que el ingreso de Estonia en la eurozona es "la justa recompensa para un país que ha registrado una sólida política presupuestaria". En su opinión, la divisa europea aportará a la economía nacional estabilidad y bienestar.
Justo después del cambio, algunos comerciantes registraron alteraciones en las cajas registradoras. Los comercios seguirán aceptando corona estonia hasta mediados de enero como moneda paralela en los comercios.
DPA
Editor: Enrique López